Anillos Del Tonalli: Vida Y Muerte(Finalizado).

10.- Corrupta.

Chelsea pasó un buen rato explicándome las funciones de ese aparato, pero finalmente entendí las más importantes, ya que no era algo completamente nuevo gracias que sabía utilizar la computadora.

-Genial, ahora no solo debo preocuparme por ir a la escuela pretendiendo ser alguien más. También tengo que mantener con vida esta pantallita. Aunque no puedo estar molesto, gracias a eso descubrí algo que podría ser beneficioso-pensé.

-¿Tú hermana practicaba algún deporte como tú?.

-No, en realidad jamás hacía nada.

-Vaya, una habilidad nueva completamente desperdiciada-pensé desanimado-, pero... tal vez no del todo.

Rápidamente pensé en ser Chelsea.

Una vez en su cuerpo, dejé de pensar y me concentré únicamente en un combate. Fue entonces que su cuerpo se movió solo, efectuando poses para hacer llaves de lucha.

-¡Increible!, realmente puedo accesar a las habilidades del cuerpo que uso.

Cuando comprobé mi teoría, abandoné su cuerpo, pero esta vez reaccioné a tiempo para evitar su caída.

Después de eso, fui a dejarla a su cuarto y cuando despertó, se dió cuenta de que algo raro le había pasado.

-Fuiste tú, ¿Verdad?-acusó volviendo al cuarto después de un rato.

-¿De qué hablas?-dije recostado en la cama ya con ropa holgada y sin sostén.

-¡No mientas!, Desde que tú estás aqui me he desmayado tres veces.

-Vaya... Creo que fui algo descuidado con eso-pensé-, parece que está niña es mucho más inteligente de lo que parece.

-Seguramente me robas mi energía para seguir en el cuerpo de mi hermana. ¡Eres algo así como un vampiro fantasma!.

-Aunque bueno, no importa cuánto haya madurado, sigue siendo una niña-pensé nuevamente.

-¿Y para que querría hacer eso?, ¿Acaso me ves agusto en el cuerpo de tu hermana?.

-Bueno... No, pero...

-Olvídate de esas cosas, ¿Quieres?.

-Ay, ¿Pero entonces que es lo que me haces?-preguntó enojada.

-La realidad puede ser más cruel en ocasiones.

-No me importa, quiero saberlo-insistió.

-De acuerdo, niñita. Desde que te pusiste el anillo, soy capaz de poseer tu cuerpo cuando yo quiera, pero cuando salgo de él, te desmallas por un rato.

Su cara se transformó en la de horror por unos segundos.

-¿Para que querrías hacer eso?-preguntó con miedo.

-Bueno, parece ser que cuando te pones el anillo por primera vez, me veo obligado a hacerlo, la segunda y tercera vez, solo fue para probar algunas cosas con el anillo.

-Bueno, si lo dices de esa creo que está bien-chelsea se dió la vuelta en dirección de la puerta y dió dos pasos-... Si como no-rápidamente volvió el cuerpo a mí y se abalanzó.

-Maldito pervertido, seguramente usas mi cuerpo cuando te aburres, pero ni creas que te lo voy a permitir-decía golpeándome con una almohada mientras estaba arriba mío.

En un movimiento desesperado, la lancé contra el suelo.

-¡Ya te dije que no me interesa hacer algo así!.

Chelsea comenzó a reír.

-¿Qué te ocurre, niña?.

-No es nada. Es solo qué ya sabía que no eres malo. Has tenido esa habilidad desde el principio y aún así has cooperado conmigo. Incluso ahora pudiste usar ese poder en mí, pero no lo hiciste.