Mi mate.

09-Más allá del Domo. -

09:
-Más allá del Domo.-

-Como hiciste eso?

-Sólo salte. -respondí a su pregunta...

-Madeleine no corras, te lastimaras!! -grito Romeo.

-Madeleine detente! No pasarás! -grito mi padre a la vez.

Pero fue tarde cerré mis ojos con fuerza y cubri mi cabeza con un de mis brazos, mágicamente atravese el campo protector sin ningún rasguño. Aunque caí sobre un cuerpo y nos dimos un fuerte golpe en la cabeza, un quejido de dolor salió de mi boca saque mi cuerpo de enzima del suyo y quede sentada en la tierra húmeda levante la mirada y observe lo que tenia en frente todo se veía verde lo único que se podía observar era un gran bosque verde.

-Pasé -susurre para mi misma. -Lo atravese.

-Como hiciste eso? -preguntó una voz conocida. Era Matt. El al igual que yo estaba en el suelo creo que mi golpe fue amortiguado por su cuerpo.

-Sólo, salte. -respondí a su pregunta.

-Sólo saltaste? Nadie salta y atraviesa un campo de contención. -mencionó entre dientes.

-Pues sólo salté! -volvi a mencionar.
Busque a mi hermano y al verlo sorprendido me levanté y lo abracé, el me lo devolvió con gusto.

-Porque no me lo dijiste? -susurre aún en el abrazo.

-No quería preocuparte. -susurro sobre mi cabeza. El aunque era el menor era una cabeza más alto que yo.

-Y crees que no decir que te ibas al exterior iba a hacer una diferencia, crees que no me preocuparía? Eres mi hermano pequeño.

-Necesito que vuelvas a la manada, no puedo llevarte, podría ser peligroso.

-No, quiero ir contigo. -nos separamos del abrazo.

-Eh dicho que vuelvas. -mencionó firme.

-Y yo eh dicho que no.

-Madeleine eh dicho que vuelvas ahora mismo.

-Está pelea de hermanitos es suficiente. -Mencionó molesto Matt.

-Tu cierra la boca. Yo también iré al mundo de los humanos con ustedes, fin de la pelea.

Empecé a caminar en línea recta.

-Es la primera mujer tan terca que conozco. -habló Eliot.

-Y yo vivo con ella. Te acostumbras. -Mi hermano me siguió por atras junto con los otros dos. Un rato después se me vino a la cabeza una pregunta asique decidí cuestionarla.

-Y...cuel es el propósito de salir al exterior?

-Es, confidencial. -respondió Eliot.

-Es algo que no te interesa -respondió esta vez Matt.

-Si no me interesara, no preguntaría, y además ya estamos en camino asique mínimo debería saber a que vamos al pueblo de los humanos. Verdad? -levante una ceja aunque ninguno me vio porque mi vista se mantenía en el suelo por si pisaba algo que no quisiera pisar.

-Hay un clan de rebeldes que se está alzando contra nosotros en especial...

-No le digas! -apretó los dientes Matt.

-Ya está con nosotros, No?

-Como decía son hombres lobo, se sabe que la mayoría son hombres y hay pocas mujeres pero sus hijos son los más involucrados ya que son a ellos a quienes mandan a hacer los trabajos sucios, es típico en ellos poner la vida de sus hijos en peligro antes de la suyas. Se esconden entre los humanos, la mayoría de sus hijos van a la secundaria y estan cursando octavo año. Es por eso que iremos a investigar un poco más a fondo. -se acercó más a mi y puso una de sus manos en mi hombro. Yo detuve el paso y miré su mano y luego sus ojos -Asique prepárate, no verás a tu familia por un buen tiempo. -soltó mi hombro y siguió caminando dejando me ahí sola.

A que se refiere? No pasaremos uno o dos días sino un buen tiempo? Cuánto es, exactamente, un buen tiempo? Como los encontraremos? Y que haremos si nos topamos con una manada completa? Dios tengo tantas preguntas y cero respuestas, pero no quiero hacerselas porque me tacharan de bocona y seguro querrán devolverme. Yo sólo quería una aventura interesante, no pensé que podría ir al exterior, aunque prácticamente me cole. Bueno, yo quería una aventura, frente a mi tengo una aventura, no tiene nada de malo, será épica.
Pero...y Si quieren quemarnos por algo que hicimos? No, no, no, dejaré de pensar cosas inecesarias.

-Y...masomenos, cuánto falta para llegar?

-Bastante.

-Y porque no corremos? -sonreí -hagamos una carrera, el que llega último le concede un deseo al que llega primero. -miré a mi hermano. -O tienen miedo de perder? -miré al resto.

-Miedo nosotros? -habló Matt. -Prepárate para perder niña creída.

-Claro. -formamos una línea como punto de partida, recuerdo cuando hacía eso de niña.

-Ey estas pisando la línea, no vale -Eliot apuntó la punta del pie de Matt que pasaba la línea.

-Que? No es sierto! -le respondió.

-No culpes a otros, tu pie también está fuera de la línea. -todos corrieron la punta del pie.

-A la cuenta de tres! Listos? -pregunté y todos me respondieron con un 'Si'. TRES! -mi grito salió disparado igual que mis pies al correr.

-Eso es trampa!! -gritaban detrás de mi.

-No sabes que el Uno y el Dos van antes del Tres?!! -trataban de seguirme el paso pero yo iba más adelante aún así podía escuchar sus gritos fuertes y claros. La noche empezaba a caer poco a poco, y el sol empezaba a esconderse. Poco a poco los árboles fueron más escasos es por eso que empecé a reducir mi velocidad hasta detenerme cerca de un gran puente sobre el río angosto que dividía el bosque y el pueblo.

-Matt y Eliot fueron los últimos. -dijo Romeo.

-Deben hacer Piedra, Papel o Tijeras. El que pierda me tiene que conceder un deseo.

-No puedo creer que una niña me diga lo que tengo que hacer. -se quejó Matt. Sus manos formaron un puño y cada quien hizo su elección al azar, Eliot había sacado tijeras y el perdedor de Matt había sacado papel. -Genial -susurro para si mismo.

-Vives para quejarte o vives porque quieres?

-Sólo dime lo que quieres -se cruzó de brazos.

-No se, lo pensaré. Esa es la colonia de humanos? -pregunte señalando las estructuras de roca.

-Si -respondió Eliot. Puso su mano en mi hombro -Y...ya no es una Colonia, se llama Ciudad y no se dice humano se dice persona te verán como una rara si le dices humano a alguien -camino delante de mi. Que tiene con mi hombro?

-Hay lo siento señor intelectual. Pero...que es una ciudad? -pregunté confundida.

-Es como una colonia, pero más grande y con estructuras de rocas, hay más Personas -remarcó eso- y se transportan en Autos -volvió a remarcar- para no utilizar las piernas, eso les permite moverse por la ciudad cuando ellos quieran.

-Las piernas no les funcionan?

-Claro que si, pero se cansan con facilidad.

-Y no son malos? -las preguntas salían de mi boca por si solas.

-No, bueno, si, su apariencia muestran una cosa, pero sus palabras pueden mostrarte otra cosa, es lo mismo en todas las especies.

-Supongo que si. -Ya habíamos pasado por el puente de piedra gris. Pero no podíamos ver a ningún humano, es como si todo hubiese quedado abandonado. -Que es ese sonido? -pregunté siguiendo el ruido de lo que parecían ser flautas y tambores.

-No te alejes, puedes perderte. La ciudad es como un laberinto. -me detuvo Eliot.

Pero aún así nos acercamos cada vez más, el sol comenzaba a ocultarse pero aún así logramos reconocer unas luces de colores entre las paredes, se escuchaban muchas voces y sonidos de intrumentos. Cuando llegamos me sorprendí mucho que agarré a mi hermano del brazo.

-Creo que los humanos mutaron -dije apretando el brazo de mi hermano contra mi pecho por si me hacían algo.