Capítulo X

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Habla Danilo

Podría sentir como su corazón palpitaba a mil por hora. Ella se había enamorado de mí en tan poco tiempo pero no entendía lo que yo sentía cuando la veía. ¿Podía ser...? No, eso no puede ser, eso interfiere con mis planes.

Abrí mis ojos mientras la besaba y vi que detrás de nosotros estaba parado Nicolás viéndonos y una sonrisa se dibujó en mis labios.

De repente de la nada salió Helen interrumpiéndonos. Tosió y nos separamos de inmediato.

-Siento interrumpir esta tan desagradable escena pero tus padres te están buscando Natalia - dijo Helen con cara de asco al vernos.

No pude evitar sonreír al escuchar el comentario de Helen.

-Está bien. Te veo luego - dijo Natalia dándome un beso en la mejilla.

Al verla desaparecer en la oscuridad salió Nicolás de su escondite, se acercó a mí y me lanzo un golpe el cual no lo pude esquivar, tirado en el suelo lo mire y sonreí al ver que me había partido el labio, me levante y respondí con un derechazo.

-¿Qué se supone que estás haciendo? - dijo muy enojado.

-¿Qué piensas que estoy haciendo?

-Tú más que nadie sabes que yo amo a esa mujer más que a nada en este mundo y ahora estás jugando con ella.

-Sí, lo sé ¿y?

-¡¿Y?! - dijo admirado - ¿Por qué haces esto?

-No me digas que tan rápido se te olvido - sonreí de medio lado.

-¿De qué hablas? - dijo sorprendido.

-Te voy a refrescar un poco la memoria. Hace 6 años tú me robaste a la mujer que yo más amaba.

En su cara se reflejaba un gran asombro. Al parecer él ya no se acuerda de lo que me hizo.

-Recordaste ¿verdad?

-Sí, lo hice pero ¿por qué ella?

-¡Fácil! Estás enamorado de ella.

-¡Déjala en paz! Haz conmigo lo que se te dé la gana pero a ella no la toques. A ella no.

-¡JAMAS! Yo quiero verte sufrir de la misma forma que yo lo hice cuando me quitaste a mi prometida. Tú crees que no me dolió verte con Cristina.

-Eso fue un error. Eso nunca debió haber pasado y tú más que nadie sabe cuánto me dolió perder tu amistad y cuánto sufrí por recuperarla. No quiero volver a pasar por esto. Por favor para con esto.

-Pero paso y no sabes cuánto sufrí no solamente perdí a mujer que más amaba sino también a mi amigo. A mi mejor amigo.

-Yo también perdí a mi mejor amigo. Te suplique por dos años que me perdones y no puedo creer que todavía tengas rencor.

-Que tonto eres. Creíste que te iba a perdonar tan fácil después de encontrar a mi mejor amigo y a mi prometida teniendo sexo.

-Lo siento, no me alcanzara la vida para disculparme pero te lo pido no le hagas daño a Natalia, haz conmigo lo que quieras pero a no le hagas daño a Natalia.

Sonríe al oír esas palabras. Me sentía como el padrino o algo por el estilo. Lo tenía en mis manos y eso me gustaba.

-¡Ja! Eso no va a hacer tan fácil.

-Te lo pido déjala en paz ella no tiene nada que ver con nosotros.

-¡CLARO QUE TIENE QUE VER! - grite - Ella es la mujer que tu amas y voy a ser que sufras lo mismo que yo sufrí.

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