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Al terminar la cena, Harry solo podía pensar en lo bien que se le veía al rubio tener el pelo un poco rebelde de vez en cuando, pero no quiso pensar en eso, ya que si lo hacía, inconscientemente volteaba a la mesa de Slytherin, así que trato de enfocarse en la plática que tenían sus amigos.

-... mañana con Slughorn vamos a hacer una poción individualmente, dicen que cada quien va a tener una diferente, de esa manera no podremos hacer trampa los unos con los otros como el profesor dice.

-¿En cerio? Rayos, yo quería que me tocara con Harry para que el hiciera todo- dijo Ron dándole un codazo amistoso al ojiverde.

-Que gracioso Ron, pero por más que seas mi mejor amigo, no puedo evitar sentirme usado en clase de pociones- dijo Harry con un claro tono indignado con lo cual el y la castaña rieron discretamente.



Después de cenar, tal como pensó, Ginny lo estaba esperando en una de las curvas hacia la sala común de Gryffindor.

-Hola chicos, ¿Les molestaría si me robó a Harry un momento?

Hermione dudó entre si dejarlos a solas o no, ya que no los había visto juntos ultimamente.

-No, adelante... ammm, ¿Harry? Nos vemos en la sala común ¿si?

-Ammm... ok- dijo mientras se volteaba otra vez hacia su novia, con la cual casi no había hablado, no por ignorarla, simplemente no coincidían en clases, ni descansos, y en la cena a ella se le podía ver con sus amigas al otro lado de la mesa de Gryffindor, así que no, no habían hablado desde hace vario tiempo ya.

-Bueno... ¿Que tal as estado Ginny?- preguntó para romper el incomodo silencio en el que se habían sumido.

-Harry dime la verdad- dijo la pelirroja después de sonreír para despedir a su hermano y su novia, volteándose hacia el- toda la cena te la pasaste viendo a Malfoy, a Ron el otro día se le escapó decir que en tu baúl encontró una nota para ti de el, pero que no la leyó, y escuché a Pomfrey decirle a McGonagall que lo llevaste a la enfermería cuando se torció o rompió el tobillo- se podía escuchar su voz un poco quebrada, pero cuando Harry iba a contradecirla continuó- se que ya casi no hablamos... pero después de las clases y los entrenamientos de Quidditch quedo exhausta de vez en cuando- eso era cierto, desde que Ginny entro al equipo de Gryffindor practicaba más que los demás, aun que era buena, pasaba mas tiempo que todos practicando- y cuando hoy quería dar un paseo por el lago negro con mi novio, veo cómo se queda embobando viendo al hurón de Malfoy...

-Ginny, por Merlín, ¿no creerás que me gusta Malfoy, verdad?

-Tal vez... es solo que... no te voy a negar que es atractivo, por qué por algo es uno de los mas guapos de todo Hogwarts, incluyéndote, pero no se, esa posibilidad no se me hizo tan... descabellada.

-Ginny...- dijo con un tono de consuelo- digo, ayude a Malfoy fue por qué no había nadie más en el salón de pociones, en la carta solo para agradecerme de que lo lleve a la enfermería y que le pedí a Zabini que le entregase sus tareas, y si lo mire en la cena, no creo que tenga algo de malo, tú también vez a otros chicos y chicas y no creo que ya por eso ya me estás engañando ¿O si? O ¿Solo por eso me gusta alguien? Solo fui amable. Lo habría hecho por cualquiera y tú más que nadie lo sabes.

Ginny se quedo callada por un rato pensando en lo que su novio le había dicho, por un momento se sintió tan estúpida por haber pensado que su a su novio le gustaban los chicos, y que tenía un flechazo por su rival más grande.

-Ohhh lo siento tanto Harry- dijo Ginny abrazándolo- no se cómo pude pensar eso de ti- continuó con una lágrima escapándose por sus ojos- creo que me sentí un poco celosa y pensé lo peor, de verdad, perdóname- dijo sobre el pecho de Harry.

Amor entre enemigos Where stories live. Discover now