One

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Bebí del té nerviosa mientras miraba de reojo a aquella chica que conversaba animadamente con mi amiga.

Me pregunto si se habrá notado mi incomodidad en ese momento.

—Entonces luego de encontrar la información, se la pasas a Sana para terminar el trabajo —le recordó —, tal vez después nos vamos a la fiesta que todo el mundo espera con ansias.

—Sería genial.

Tzuyu solo sonrió al escuchar la propuesta, mientras que Momo le dirigía una mirada cómplice.

No quedaba mucho tiempo para finalizar el proyecto que nos encargaron, pero el optimismo de la rubia era grande, más que el mío para ese entonces.

El único vínculo que tenía con Momo aparte de ser compañeras de clase era la taiwanesa.

Aún cuando ellas pasaban mucho tiempo juntas en los cursos que compartían en el colegio nunca me atreví a preguntar a Tzuyu sobre quién era.
Momo era prácticamente la única que la hacía reír y hacerla sentir en confianza aparte de mí.
Sin embargo, no me había llamado la atención a la primera.

Pero esa vez en la que nos tuvimos que reunir en el cafetín para organizarnos, la vi diferente de cierta forma.
Ya no era solo una chica más, había una conexión que ninguna logró ver rápidamente.

Esa idea me parecía muy cliché cuando pasó por mi mente en aquel momento, pero cada vez tiene más sentido.

Era como si tuviera la necesidad de conocerla. Y no iba a dejar pasar la oportunidad.

•••

Como nuestra reunión para el proyecto de la escuela había durado menos de lo esperado caminé con calma hacia la estación del autobús, sin importar la lluvia intensa que amenazaba a todo Seúl.

Pude haber entablado una conversación con Momo al salir del cafetín pero ella se fue en dirección contraria.

Bueno, para otra ocasión será.

¿Por qué de la nada me preocupa conocerla?
¿A Tzuyu le importará?

Me senté y conecté los auriculares a mi celular. La espera en la estación va a ser larga.

Pasaron los minutos y más personas llegaban apresuradas. El tráfico no ayudaba y los pocos buses que aparecían eran llenados con rapidez.

Por casualidad miré hacia un lado y el nerviosismo me invadió sin previo aviso. ¿Qué hacía Momo ahí?

Estaba al otro extremo de las bancas, distraída por el movimiento de la gente. Se veía muy tierna. Sonreí ligeramente mientras la seguía observando de reojo. Pero luego desvié la mirada cuando notó mi presencia.

Tranquila, solo ignórala, estamos lejos una a la otra, no creo que se acerque porque hay muchas personas.
¿Por qué me siento nerviosa?

—¡Hola! — ¿Cuándo llegó hasta acá?

—Hola, Momo —intenté sonar tranquila, me había sacado un susto —¿También esperas el bus?

—Claro, solo que fui por un lugar diferente para llegar antes.

—Ya veo, por tomar el camino convencional voy a terminar resfriada.

—Debes explorar —rió mientras buscaba un espacio para sentarse al lado mío.

—Oye ¿De quién es la fiesta que dijiste en el cafetín? —pregunté en un intento de alargar la conversación al mismo tiempo que guardaba mis auriculares.

—¿Que no lo sabes? Realmente estás muy perdida

—¿Por qué? 

—Obviamente las mejores fiestas son de Jackson Wang, del último año. ¿Cómo no te enteraste?  —la miré confundida

—Pues seguro fue a entregar las invitaciones personalmente.

—Fue a nuestro salón el martes para avisarnos a todos

—Creo que me dormí ese día

—Como sea, debemos terminar el trabajo lo más pronto posible para ir.

A los veinte minutos de esperar, la lluvia redujo considerablemente y con ella el tránsito de personas.
Nos quedamos hablando hasta la llegada del bus. Me sorprendí nuevamente al ver que ella subía al mismo que yo.

Aunque la cantidad de gente lo hacía más complicado, traté de estar junto a ella durante el viaje. Ni siquiera había algún asiento, así que estaba parada cerca suyo mirándola de reojo ocasionalmente.

Sin darme cuenta Momo y yo estábamos en la calle dirigiéndonos a su casa.

Bravo, reina de la impulsividad.

El recorrido fue tranquilo, no quería romper el silencio que extrañamente era muy agradable para mí, así que solo me limité a caminar a su ritmo mientras compartía con Momo el chocolate que había traído.

¿Por qué me pareció tanto tiempo si solo eran tres cuadras?

—No sabía que éramos vecinas —comentó Momo al tener un edificio al frente, donde al parecer estaba su apartamento.

—Vivo algo más lejos.

—Ah bueno —frunció el ceño ante mi respuesta —¿Entonces por qué me acompañaste?

—Ni yo sé —mis mejillas  comenzaron a arder y me reí para disimular —, sentí que me alcanzaba el tiempo para caminar un poco, supongo.

—Entiendo —dijo ella mirándome con una leve sonrisa—, ahora aparte de resfriarte, también llegarás tarde por ello.

—No te preocupes, aún no está atardeciendo

—De todas formas es mejor que te vayas —Momo y yo tuvimos contacto visual por unos segundos y no supe cómo reaccionar

—T-tienes razón —murmuré mientras veía que se alejaba.

Miró su teléfono un instante, cruzó la pista, caminó hacia aquel edificio, saludó al guardia que estaba en la entrada y vi alzar su mano a mí a modo de despedida.

Solo pude sonreírle de vuelta antes de perderla de vista.

Me quedé mirando el edificio donde vivía la pelirrubia, como queriendo tener una imagen clara de recordar más tarde. Suspiré.

Realmente nada de lo que pasó fue planeado...

Seguí caminando, divagando a través de ese tranquilo vecindario hasta que pude ubicarme y llegar a mi casa. La distancia no era mucha en realidad. Solo quince minutos a pie, como ir a un restaurante con mi familia cada fin de semana.

Me lancé a la cama de mi habitación ni bien entré a mi casa y rodé encima de ella hasta casi caer al suelo. ¿Desde hace cuánto tiempo que no hacía eso?

¿De verdad tengo que conocerla?
Realmente no sé.


•••

N/A: Holaaa~ aquí dando señales de vida.
Como hoy es cumpleaños de nuestra amada Sana (bueno, a estas horas ya habrá pasado en Corea :'v), decidí hacer algo por ella y pues...here you are :3

Como estoy de vacaciones ojalá pueda actualizar seguido porque realmente quiero hacerlo.

Este es mi primer fanfic de Twice, espero que les guste. Denle amor pls *-*

Bye~

•More than fate - Samo (사나 × 모모)• [PAUSADA]Where stories live. Discover now