La Lista del Chico NO Ideal

Capítulo 2: "Mi lista"

Después de que viese como Francisco le pedía matrimonio al amor de su vida, lloré y traté de explicar de mil formas todo lo que había pasado, pero no encontraba ninguna en la que no terminara sintiéndome patética, tonta o poca cosa para él. No se que tan común sea que una persona que no tiene esperanzas con alguien se enamore al punto de soportar tanto tiempo centrada en esa persona, rechazar oportunidades de conocer chicos y poder llegar a vivir una linda historia de amor. Pero si es que existe alguien que vive o vivió algo como yo debería saber que no es el o la única en el mundo que vivió algo parecido.

Quisiera explicar que es lo que Francisco me hacía sentir con solo verlo. Era algo tan fascinante, él, sin saberlo fue el encargado de hacerme sentir todo eso que se cuenta en los libros o se ve en las películas. Y no hablo solo de esa sensación en el estómago, habló también de esa "magia" de ver a esa persona especial y sentir que en ese momento solo existen dos seres en el mundo, el o ella y tú; Habló también de esos sueños que llegan mientras estas dormida y hacen que despiertes con una sonrisa en el rostro, aún cuando sabes que solo es eso, un sueño. Hablo de eso que te posee y te hace cometer tonterías que creíste nunca ibas a cometer, todo a causa de esa persona a la que consideras ideal.

Lamentablemente, no solo puedo explicar esa sensación bonita, porque gracias a él también conocí lo que es amar sin ser correspondido y peor aún. viví lo que es ver como la persona a la que consideras como el amor de tu vida le pide matrimonio a la persona que para él es el amor de su vida y no eres tu. Eso fue el golpe de realidad que necesitaba para saber que aunque doliera o fuese difícil el momento de olvidar y abandonar la esperanza había llegado, después de haberle regalado en silencio cinco años de mi vida, después de guardarle esa fidelidad, devoción y amor por tanto tiempo era el momento de sacarlo de mi vida, por mi propio bien.

El problema era que no sería nada fácil, porque lo poco que lograba avanzar para poder seguir se borraba cuando el aparecía con su sonrisa y volvía a sacudir mi mundo. Cada vez que conocía a un chico que daba señales de estar interesado en mi, resultaba que no llenaba ni la mitad de mis expectativas de lo que consideraba ideal porque siempre terminaba comparándolos con él y terminaba alejándome. Mamá me alentaba y decía que eso pasaba porque no había llegado el chico adecuado, pero que cuando llegase ni Francisco ni nada más importaría. Yo rogaba porque tuviera razón y así fuera.

Fue una noche después de verano. después de volverlo a ver junto a su novia, cuando decidí que debía hacer algo para superarlo de una vez por todas, no creía en eso de "un clavo saca otro clavo" y tampoco me permitiría renunciar a mi familia para alejarme de él todo el tiempo que fuese necesario, porque aunque él estaba en otro estado, el problema era cada vacación cuando regresaba y le volvia a ver. Así surgió la idea de crear mi lista del chico no ideal. A simple vista cualquiera que la leyese quizás llegaría a considerar que muchos de los puntos que están ahí son una locura, pero dentro mi realidad y experiencias de vida, cada punto que plasme tiene una justificación y una razón logica de por que lo considero importante.

1. El chico no ideal tiene novia, de más está explicar esto, no sería capaz de robarle el novio a ninguna chica y me rehusó a volver a sufrir viendo como la persona de la que me enamore está con alguien más.

2. El chico No ideal, es hijo de amigos, compañeros o vecinos de mis padres. Los pocos de mis padres eran como mis tíos y sus hijos eran esos primos molestos a los que no quieres cerca, sus compañeros eran demasiado entrometidos, por lo que salir con alguno de sus hijos sería algo muy incómodo además, sus hijos no eran las personas más amistosas del mundo, muchos de ellos estaban en mi rango de edad, pero o eran demasiado serios y creidos o eran unos inmaduros de lo peor; en cuanto a algún vecino, seguramente lo pasaría comparando con Francisco y eso no sería nada bueno para mí.