Inside to my heart - Harry Styles (AU)

~01~

Escuché el despertador sonar y me estiré en la cama para apagarlo, provocando que Armin, mi lindo y gordo gato negro, saliera corriendo y maullando

Lo siento- susurré refregando mis ojos

Era sábado y tenía guardia en el hospital, lo que significaba que no volvería en todo el día.

Me levanté de la cama y prácticamente me arrastré hacia el baño donde me di una ducha rápida.

Al salir estaba cambiándome cuando mi celular comenzó a sonar y corrí hacia él para tomarlo

O'Neill- dije atendiendo

¿O'Neill?- gruñó mi padre- ¿Por qué usas el maldito apellido de tu madre?

Buen día para ti también- rodé mis ojos

Lo siento, quería saber cómo estabas- suspiró

Estoy bien, ¿Y tú?- caminé hacia la pequeña cocina del departamento

También, esta semana estaré por Londres, ¿Crees que podamos vernos?- preguntó

Si, supongo- levanté mis hombros mientras me servía un poco de jugo de naranja- los sábados tengo guardia, pero el resto de los días trabajo normal

¿Cómo te está yendo?- preguntó luego de unos segundos

Bien, papá, debo colgar- jugué con el vaso- debo ir al hospital

De acuerdo, cuídate cariño- pidió

Tu también- sonreí mientras cortaba la llamada

Mi padre era un caso especial, él había estado siempre para mí, aun cuando estaba ausente físicamente.

Armin- grité tomando su comida de una de los estantes para llenar su platito, lo que provocó que subiera a la encimera para refregarse en mi estómago- Ohhh mamá va a extrañarte- rasqué detrás de su oreja- recuerda que debes comer solo cuando tienes hambre y te debe durar todo el día- besé su cabeza- compórtate.

Caminé hacia la sala y tomé las bolsas que había preparado la noche anterior para luego salir del departamento.

No debía caminar mucho hasta el hospital ya que solo vivía a media calle, si, había tardado muchísimo en encontrar algo tan cerca, y aunque apenas tenía una habitación, una cocina y una pequeña sala, para la función que cumplía era perfecta y realmente económica.

Cuando llegué al ascensor suspiré al ver que estaba fuera de servicio, seis pisos, debía bajar seis malditos pisos con dos bolsas repletas de cosas.

Casi diez minutos después estaba entrando al hospital, al menos estaba tranquilo, quizá porque recién eran las ocho de la mañana o quizá hoy era uno de esos días en los que no había tantas complicaciones y emergencias.

Vi a Ashton, un chico de cabello rubio, un poco largo, delgado y alto, muy alto, me llevaba prácticamente una cabeza. Él era dulce, amable y tierno, aunque también era muy serio y obstinado, y sobre todo, era mi mejor amigo.

Ashton había sido mi compañero en la escuela de medicina en Irlanda, su familia era de Australia, por lo cual estaba completamente solo y cuando nos conocimos fue inevitable que nos hiciéramos amigos. Yo me convertí en su familia, como él en la mía.

Incluso cuando decidí mudarme a Inglaterra él decidió que quería venir conmigo y ahora allí estábamos, ambos viviendo prácticamente juntos, ya que vivía en el departamento junto al mío

Ash- sonrió cuando llegué a su lado

Llegaste- rió abrazándome

Está todo muy tranquilo- fruncí el ceño

Es temprano aun- levantó sus hombros- ¿Cómo dormiste?

Bien, gracias por cuidar de Sam- suspiré- ¿Cómo esta él?

Duerme, anoche le costaba un poco respirar, pero la doctora Black dijo que era por la quimioterapia- hizo una mueca- preguntó por ti toda la noche

Odio irme así- gruñí

Debías descansar, no sirves sin dormir- acarició mi espalda- ve, quizá este despierto, te cubriré unos minutos

Gracias- besé su mejilla antes de caminar hacia la habitación de Sam

Por suerte no me crucé a nadie en el camino, aunque no estaba lejos, ya que debía agradecer que lo hubieran puesto en una habitación cerca de donde me encontraba siempre.

Entré a la habitación lentamente y vi al niño de cabello negro y ojos azules, completamente dormido.

Dejé ambas bolsas sobre el sofá y me acerqué a él para acariciar su cabello provocando que suspirara

Se veía cansado, aún más de lo que había estado anoche cuando me había ido.

Todo estará bien Sam- susurré- estoy aquí

Besé su frente suavemente para luego arroparlo bien antes de salir de la habitación sin hacer ruido

Iba a ir hacia donde estaba Ashton cuando vi a la oncóloga del hospital, una mujer de unos cincuenta años, rubia y de aspecto tan frio como equivocado, ella era dulce y sincera, todo lo que una persona necesitaba a la hora de recibir malas noticias

Doctora Black- me acerqué a ella

Katherine- me sonrió- ¿Tienes guardia hoy?

Si, ¿Cómo esta Sam?- pregunté preocupada

Bueno, respondió bien a la quimioterapia de ayer, lo note muy cansado y es común, hoy lo dejaremos descansar y mañana volveremos a hacerlo

¿Aún no hay coincidencia? Los que vinieron a hacerse las pruebas para donar medula ósea...- susurré- ¿Alguno fue compatible?

Vi cómo se quedó mirándome unos segundos antes de poner una mano en mi hombro

Aún faltan un par de resultados, pero encontraremos a alguien, él es fuerte- sonrió

Es solo un niño- respiré hondo para no desmoronarme en ese momento- debo...- señalé hacia uno de los pasillos- debo irme, mi turno empezó hace unos minutos

Ve- asintió- si tengo noticias, te buscare

Gracias- susurré corriendo hacia donde Ashton aún estaba completando unas planillas

¿Estaba despierto?- preguntó cuando llegué a su lado y negué- ¿Cómo lo viste?

La doctora Black dice que ha reaccionado bien ayer- me apoyé en la recepción mientras leía uno de los expedientes- gracias por cuidarlo anoche, en verdad necesitaba dormir

Cuando quieras- sonrió

Eres un gran amigo Ashton- suspiré- estoy agotada, mental y físicamente- lo miré- no sé qué haría sin ti

Bueno, me tienes- rió- solo me debes un trago

Hecho, por cierto, tu madre me llamó anoche- me miró confundido- dijo que no hablas con ella hace mucho

Sí, es verdad- rodó sus ojos- ya le he dicho que no debería llamarte a ti

No me molesta- le sonreí mientras me alejaba de él- la aprecio, no me molesta hablar con ella

Eres como su hija- me guiñó un ojo y reí

Nos vemos luego Ashton- dije caminando hacia la habitación de uno de mis pacientes