Siempre tuya, siempre...

Capitulo 11 - ¿Qué haria sin ti?

Espere toda la noche por un llamada de Daniel, sin embargo, no obtuve resultados. Él no lo hizo y eso de alguna manera logró enojarme, es decir, se que no somos nada aún pero me gustaría que las cosas fluyeran correctamente entre nosotros, si es que existe un "nosotros".

— Mía, ¿qué haremos hoy? — pregunta mi amiga.

— Em... no lo sé — digo desanimada.

— ¿Qué te pasa Mía?

— Nada — respondo rápidamente— Es solo que creí que Daniel me llamaría y no lo hizo.

A ella no le puedo ocultar nada.

— Debe tener alguna explicación cielito, sabes todo lo qué pasó anoche, seguro tenía muchas cosas en mente — dijo y eso me calmo.

Quizás tenga razón. Anoche la fiesta de Peyton estuvo envuelta en dramas y peleas, creo que lo más prudente es que respete su espacio.

Después de un rato decidimos ir a comer con Crhis fuera de la casa. Era domingo y no teníamos que trabajar. Fuimos a un restaurante en la ciudad y ahí pasamos la tarde entre risas los tres.

— Oye Mía, ¿sabias que a tu amiga le dicen la salvaje? — dijo Chris y yo reí a carcajadas.

— Muy graciosos— dijo mi amiga fulminadonos con la mirada.

— Oh, vamos Juliet, estuviste grandiosa — dije y ella rio.

— Debiste ver la cara que puso esa chica — dijo Crhis riendo — Era como "Te mátare zorra" — dijo y todos estallamos en carcajadas.

Algo así quería. Una tarde con amigos de esas que te hacen olvidar todo.

Después del almuerzo nos vamos de nuevo a casa. Al llegar, Crhis y Juliet se quedan en la puerta hablando, mientras que yo voy directo a la habitación a cargar mi celular debido a que lo traje sin batería del restaurante por todas las selfies y fotos que nos tomamos.

Luego entro al baño y por unos segundos me veo en el espejo, y si, mi cabello esta vuelto un desastre, las ondas perfectas que tenía desde la fiesta anoche, se habían arruinado. Minutos después salgo del baño y voy directo a mi cama con el celular en manos mientras carga.

Puedo notar que tengo varios mensajes, entre ellos hay uno de Mike (mi hermano) y me apresuro a responder, ya que hace mucho no hablamos pues siempre que llamo él no esta.

Mike: Hola boba, ¿cómo estás?

Si, así nos demostramos amor mi hermano y yo.

Yo: Hola tonto, todo bien. ¿Qué tal la escuela?

Luego apago mi celular y lo lanzo sobre la cama mientras salgo en dirección a la sala nuevamente, pero me detengo al escuchar que suena y me apresuro a contestar.

— Hola — digo.

— Hola preciosa, ¿cómo estás?— dice Daniel del otro lado.

— Bien — respondo seca.

Aún estoy enojada por dejarme esperándolo.

— Mía, lamentó no llamar. Estaba ocupado empacando mis cosas — dijo y lo interrumpí.

— ¿A dónde vas? — preguntó alarmada.

— Oh no, solo vuelvo a mi departamento que está aquí en la cuidad — dijo calmado.

— ¿Está todo bien? — preguntó preocupada.

— Si, solo quería saber si sigue en pie nuestra cita de hoy — dijo en un tono dulce.