Capítulo XLII: Tú te quedaste a mi lado.

Comenzar desde el principio
                                    

Dante se echa a reír, y yo me golpeo mi frente con la palma de mi mano.

-Sí, desde hace un mes -responde Dante, pareciendo aliviado-. Pensé que dirías algo peor.

- ¿Qué podría decir? -Se cruza de brazos Lore, viéndose un poco dolido.

-No lo sé, dínoslo tú, Lore -replico con tono juguetón. Mi amigo rueda sus ojos, y me señala con su dedo acusatorio.

-Gloria se enojará contigo cuando se lo cuente. Esa será mi venganza por no decírnoslo antes -amenaza Lore, cantarinamente, subiendo las escaleras más rápido que un jaguar. Yo subo corriendo igual, gritando que no lo hiciera. Pero éste fue más rápido, agarrando su móvil y marcando a Gloria-. ¡DANTE Y RONNIE ESTÁN SALIENDO!

- ¡Maldito sapo de mierda! -aviento el móvil hacia el otro lado de la habitación, cayendo en un cesto de basura. Lore se le queda viendo al bote, y después me mira a mí con la boca abierta.

- ¿Cómo hiciste eso? ¡No mames, parecías un maldito mono poseído! -Exclama Lore riendo como loco. Yo tapo mi rostro, roja como un tomate.

Dante está apoyado en el marco de la puerta cuando lo oigo exclamar, emocionado:

- ¡Sí, sí parece mono poseído! Hace una cara rarísima, ¿a que sí? Como que frunce los labios y abre de más sus fosas nasales, con sus ojos azules que se vuelven como que rojos, ¿no? ¡Ella dice que no, pero sí parece mono poseído! -Le miro con cara de pocos amigos, y después alzo mi dedo de en medio. Lore para de reír, tomándose el estómago.

- ¿Aló? ¿Lore, sigues ahí? ¡Ahora voy! -Volteo a ver el móvil de Lore, que sigue con la llamada. Abro los ojos excesivamente, mirando a Lore con espanto.

- ¿Le marcaste de verdad? -Mi amigo corre hacia el bote de basura, sacando el móvil, y me inclino hacia él para ver que ella ya ha colgado.

- ¡No! ¡Pero creo que lo hice por accidente! Además, no tiene nada de malo. No es como si fuera a hacer algo más que enojarse, ¿o sí? -Dice Lore. Veo a Dante que frunce el ceño en confusión, sin saber qué hacer o decir mientras se sienta en la cama-. ¿Por qué mierda se miran de esa forma?

-Porque Gloria fue la que armó todo; los disfraces, el encuentro, lo de Caleb.

-Espera, ¿qué? -bramo sin entender ni una mierda. Yo lo decía porque era Gloria la que más nos quería ver juntos, y ahora que no le dije nada, va a obligarme a pasar un mal rato. No sabía lo demás. Creo que voy a enloquecer.

-Ella sabía que Caleb haría una fiesta, eso es obvio. Me habló a mí para que fuera, y que me vistiera de Han Solo -cuenta Dante, pensativo, mientras se sienta en la cama de mi amigo. Lore frunce el ceño.

- ¿Mi novia te habló?

-Sí. Me habló diciendo que Caleb estaba engañándote, y que estarías ahí. Es muy persuasiva. Ella es muy buena en lo que sea que haga. Gracias a ella, Vero y yo somos novios -Dante se encoge de hombros, sonriendo de oreja a oreja, yo pongo los ojos en blanco.

-Te manipuló, amor. No se lo agradezcas cuando llegue, porque si no, seguirá haciéndolo -me siento a su lado en la cama, y él me abraza por los hombros para que yo recueste mi cabeza en su hombro.

-Dios, son asquerosamente lindos juntos -Lore hace una mueca de asco, sentándose encima de su escritorio, y mira hacia fuera de su ventana, frunciendo el ceño, confundido-. Creo que ese coche es tuyo, Dante. Lo he visto fuera de tu casa.

- ¿Eh? ¿De qué hablas? -Dante deja de abrazarme, y camina hacia la ventana, yo me quedo en mi lugar, sin saber qué hacer. Frunce el ceño, y se echa hacia atrás cuando sólo se ha asomado un segundo-. ¡Por mis cojones! -Sale corriendo de la habitación como un rayo, y yo me quedo lela, sin saber qué hacer.

Desafiando a Dante (Desamores #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora