Cap 14 Sustos

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Sus ojos demostraban tristeza extrema, como si se hubiera guardado ese sentimiento durante mucho tiempo.

-No hay nada con Miguel- su voz es seria y algo vacía- pero...yo quisiera que hubiera algo-

Me quede sin palabras por esa noticia un tanto inesperada, entonces Rubén si es homosexual, le gusta Mangel pero...no tiene fuerza de voluntad para decirle sus verdaderos sentimientos; mire algo triste a Rubius, note que le corrían lagrimas por las mejillas, siento que mi corazón se me hace mil pedazos y que varias lagrimas trataban de escapar de mis ojos, me acerco a él y lo abrazo con fuerza, me regresa el abrazo.

-Ay Rubén- le limpie las lágrimas con delicadeza- ¿Por qué no le dices nada?-

-Le mando indirectas pero se las toma a juego- sus ojos miraban al vacio- si le digo algo sobre mis sentimientos...no sabría que podría pasar-

-Vamos, los dos conocemos a Mangel, nunca te dejaría de hablar- lo mire con una sonrisa, tratando de animarlo- además que soporto tus bromas por años y jamás duro enojado contigo por mucho tiempo-

Él levanto su vista, su mirada verde mostraba que trataba de analizar muchas cosas a la vez, al final me miro directo a los ojos con una sonrisa, parecía estar mucho más aliviado que antes.

-Lo que dices es cierto- se levanto del suelo con una sonrisa y tiro la toalla, Rasperry no dudo en salir corriendo a esconderse por ese rápido movimiento - mi Mangel siempre está junto a mí para apoyarme en cada estupidez que hago-

-Hey Rubius- lo mire con una sonrisa picara- desde hace años que no te veo jugar a Slenderman-

-¿Quieres que juguemos?- me miro con una mueca divertida

-¡Claro!- me empecé a reír y me levante del suelo-a ver quien dura sin gritar más tiempo-

Nos fuimos al cuarto del Rubius, mi plan para que olvidara el tema está funcionando, mientras que él prende la computadora, yo cierro las persianas, para que este mucho más oscuro y nos podamos meter más en el juego. Justamente cuando Rubius abre el juego, cae un rayo y se escucha un horrible trueno, las luces parpadearon un poco; nos miramos asustados ¿En que nos hemos metido? Traje una silla de la cocina y me senté junto a Rubius, empezamos a jugar.

-Sera MUCHO más realista con la tormenta que hay- su mirada demostraba terror absoluto- Pero ¿Qué somos? ¿Gallinas o campeones?-

-¡Campeones!- lo mire con una sonrisa- además que solo es un juego... ¿Verdad?-

-Esperemos que si- agarro la primera nota y se escucho un fuerte trueno de fondo- aquí vamos.-

Jugamos por no sé cuánto tiempo, entre sustos, gritos y golpes casi acabamos el juego, solo nos faltaban dos notas para completarlo, cada vez que recogíamos una nota caía un relámpago y se escuchaba un trueno de fondo, que ironía; nunca había visto a Rubius tan asustado hasta ahora, y eso que eh visto la gran mayoría de sus videos cuando juega cosas de terror, en eso se escucha más fuerte la música del juego.

-P*to Slenderman que lo pario- grito Rubius, me miro fugazmente- perdona las palabras-

-¿Eso qué?- lo mire con una sonrisa nerviosa, me asusta más sus gritos que el mismo juego- lo importante es que casi ganamos-

En eso se escucha que algo se cae en el departamento, nos miramos con cara de espanto ¿Soy yo o cada vez se escucha más fuerte la música?

-¡Rubius! Síguete moviendo- grite asustada- si no...Él viene-

Rubén respiro profundo y siguió jugando, le temblaban demasiado las manos, pudimos encontramos la nota ocho, falta una, pero otro ruido rompe el ligero ambiente de calma que teníamos, se escucho como cristal rompiéndose, Rubius y yo gritamos, aunque yo lo hice porque me asuste por su grito y él por el ruido del cristal, en eso aparece Slenderman dentro de juego, volvimos a gritar mucho más fuerte, de repente se va la luz, dándonos otro susto mortal para nuestros pobres corazones; aun estábamos tratando de controlar nuestros latidos cuando se escuchan fuertes golpes en la pared, me dio un abrazo protector, aunque creo que solo lo hizo por que siente mucho temor.

-¡¡Cállate Rubén!!- grito algún vecino mientras golpeaba la pared- ¡¡Qué me despiertas al niño!!-

Nos miramos sorprendidos pero al instante nos atacamos de la risa.

-Que hermosos vecinos tienes- lo mire mientras reía- son muy amables-

-Ya saben cómo soy- se encogió de hombros

En eso se escucha el mismo golpe en la cocina, mire a Rubius preocupada, entonces no era nuestra imaginación jugándonos malas pasadas, él solo se levanto, agarro una pequeña linterna y salió del cuarto, no quería quedarme sola y lo seguí. Revisamos la sala, por instinto trate de prender la luz pero aun no regresaba, de repente se escucha que cae otra cosa, Rubius apunta la linterna hacia la cocina, yo me quede en la sala, tratando de tranquilizarme, escuche que él grito.

-¡P*ta gata!- salió de la cocina con Rasperry en brazos- era ella quien hacia esos ruidos-

-Es increíble que una gatita haga tanto ruido- la acaricie la cabeza, ella mordió mi dedo y luego lo empezó a lamer- ¿Qué estaba tirando que se escuchaba como cristal?-

-Deje afuera una taza de Coca-Cola- negó la cabeza divertida- ella lo tumbo de la mesa y se rompió-

-Sigo sin entender porque los gatos hacen eso- lo mire con una sonrisa- ¿Por qué crees que lo harán?-

-Según dicen, es para calcular la masa de los objetos en caída libre cuando le afecta la gravedad- dijo entre risas, lo mire algo confundida- o tal vez lo hacen por diversión-

Nos sentamos en el sillón, jugamos por un rato con Rasperry hasta que decidió que le no éramos dignos de su presencia y se fue a dormir en su árbol para gatos, no hay mucho que hacer si no hay luz, platicamos sobre el canal de Rubius, sobre cómo era Noruega, yo le conté un poco sobre mi vida privada, el porqué me escape de mi hogar y sobre Samuel; después de unos 20 a30 minutos regreso la luz, él se levanto del sillón y se fue a su cuarto.

-Tengo muchas ganas de grabar Outlas- dijo desde su cuarto- entonces te voy a dejar unos minutos, haz lo que quieras, estás en tu casa-

-¿Puedo vender tus cosas?- mire a mi alrededor- creo que podría ganar mucho si digo que es tuyo-

-Haz lo que quieras -se asomo del cuarto con una sonrisa- excepto quemar o robar mis cosas-

Levante las manos mientras lo miraban con una sonrisa, adoro como Rubius siempre me saca grandes sonrisas. Prendo la tele y me puse a ver Pokemon, entre comerciales se me ocurrió una pequeña broma, me levanto del sillón y me acerco a su cuarto, tratando de no hacer ruido, para mi fortuna la computadora está enfrente de mí, Rubius me está dando la espalda, me agacho y camino con lentitud, veo de reojo que están persiguiendo al personaje, tomo aire y grito con fuerza mientras que lo golpeo con poca fuerza en las costillas.

-¡¡JODER!!- grito y, a la vez, quitándose los audífonos de golpe, me miro con cara de asustado- ¡______! ¿¡Qué te pasa!? ¡Casi me provocas un infarto!-

Me ataque de la risa, el grito de Rubius hizo que me asustara igual

-Eres malvada _____- se cubrió la cara con sus manos

-Vamos, se la debías a Mangel- lo mire con una sonrisa- además que no te asuste tan fuerte-

Rubius no me contesto, se sentó en la cama, aún cubriéndose la cara, lo mire preocupada, creo que en verdad me pase.

-Perdona Rubius- lo abracé por la espalda- que nomás era broma-

-Lo sé –se levanto de la cama de un golpe y me cargo en forma de caballito- ahora es mi turno de vengarme-

Rubius empezó a correr por todo el departamento, hacia rápidas vueltas y saltaba en cualquier momento, no obtuve opción más que agarrarme fuertemente del cuello y abrazarlo con mis piernas su cintura para no caer, fue la cosa más divertida que he hecho en este día, aunque lo que Samuel me hizo en la mañana se acerca a esto; en eso alguien toca la puerta, Rubius dejo de correr y abre la puerta aun cuando estoy encima de él, al ver quien estaba detrás de la puerta me quede sorprendida, sentí cómo los hombros de Rubius se tensaban, nunca espere verlo por aquí... 

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Quien era el que llego al departamento de Rubius?, estoy escribiendo esta parte de la novela mientras llueve, que clima hace por alla?, bueno, hoy es mi ultimo día de vacaciones, seguire subiendo la novela entre los sábados y los domingos, espero que les haya gustado esta parte y chau chau


Golpe de Suerte(Vegetta y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora