Enamorada De Mi Maestro ↠FxM↞

Epílogo » Hasta El Final.

Pov Meg.

Cuando lo mire a sus ojos grises, supe que el ya había cambiado, el amor que me tenía se podía ver con claridad pero también se podía ver con claridad el arrepentimiento y resignación.

—Hola—titubeo nervioso.

—De verdad, Spring, no quiero tener esta plática otra vez—dije suavemente.

—No, no, no. Esta vez es otra cosa, Meg...

—¿Cuál?

El sonríe.

Me recuerda cuando estábamos juntos.
Ahora pienso en todo eso y se me es indiferente.

—Quiero contarte todo.

—Sabes que eso ya no me importa, y...¿era necesario que me buscarás a las cinco de la mañana?—dije.

—Algo así, es que quiero que estemos bien, tú estás con Foxy, Foxy es mi bro y ahora respetaré su relación, pero...necesito que me escuches, ¿si?...

Me crucé de brazos.
¿Qué podría perder?.

—Veras—sonrie al ver que aceptó—, aún te amo, pero tengo que aceptarlo, no eres para mi, te ves muy bien con Foxy y le tengo apreció, así que me conformare con ser tu amigo, ¿que opinas?

—Creo que estará bien—digo—. Haz entendido, ya no es lo mismo y pueda que tenga una pizca de odio hacia a ti por lo que hiciste, pero con el tiempo toda herida—nos miramos a los ojos.

—Sana—dijimos al unísono y reímos.

—Y sanara rápido, lo sé.

—Y bien...¿un abrazo de reconciliación?...

Asentí y el me abrazó.
Su calor me reconforto, pero no se parecía cuando abrazaba a Fox.

Recuerdo que está mañana fui a ensayar con el.

FlashBack.

Entre al salón, despojandome de mi suéter, quedando con hombros y brazos descubiertos, ahí vi a Foxy de espaldas, sonreí.

—Al final llegas, enana—se volteo con una sonrisa algo burlona—, pensé que faltarías, ya sabes...
últimamente has estado un poco más lejos de mi. 

—¿Yo, lejos?, no seas llorón, poste—rei.

—Ah, ¿yo llorón?—nego algo enojado, sus ojos dorados estaban llenos de confusión y enfado—, no seas enana. Soy tú maestro—recordó.

—Uf, si—rode los ojos—. ¿Ensayamos o seguirás de terco, como siempre?

El se acercó a mi, mientras se encogía de hombros

—Como quieras—me tomo del brazo y me hizo dar una vuelta rápida, que casi me hace tocar el piso con la cara—, reflejos malos.

—¡Estúpido!—grite, alejándome, un poco mareada—, idiota.

—Ups, se me olvidó, la lección de hoy son los reflejos, ¿ok linda?

—Reflejos tu abuela—gruñi.

—En el baile es primordial esto, das un paso o una vuelta y por accidente podrías caer, pero si no quieres verte ridícula, usas tus reflejos para crear otro movimiento y que no se vea fallido, enana.

—Blah, blah, blah. Eso es ridículo, como tú.

Nuevamente otra vuelta, me puso el pie y entonces caí de trasero, auch.

—Imbécil—dije tirada en el piso, me veía patética.

—Así quieres aprender a bailar, Eh?—pregunto.