Catorce

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Pov Meg

Decir que estaba sin habla, era poco. Verlo nuevamente me hace sentir tantas emociones, y entre ellas predomina una...El odio. ¿Por qué?

Porqué cuando más lo necesite se fue, era mi mejor amigo, todo para mí, y de un día para otro se fue, ya no supe más de él, busque y busque. Nada. Ya se había ido ¿A dónde? No sabía, solo sabía que me abandono...Lo hizo...

¿Y vuelve como así nada más?

Claro, tal vez ni siquiera le importe, tal vez ni se acuerde de mi. Quise sonreír al imaginar que ya ni se acordaba de mi, pero también quise golpearlo, quise llorar.

-¿Meg?-preguntó al principio muuuy confundido, luego abrió los ojos sorprendido-M-Meg...

-¿Quién yo?-me hice la tonta, queriendo inútilmente que se fuera y me dejará tranquila.

¡Largo, de aquí!

-¡Eres tú, Meg!-dijo seguido de abrazarme, un calor recorrió todo mi cuerpo y las lágrimas inundaron mis ojos.

-¡Su-suéltame!-dije con la voz quebrada, mientras lo empujaba.

Me di la vuelta rápidamente, sin verlo a a la cara. Esto es mucho...

Respiré hondo, y sin dudarlo salí de ahí. ¿Qué yo no soy cobarde?, creo que sí...

Llegué a los baños de la academia y rápidamente me metí a un cubículo, por suerte los baños traían tapa así que me senté en ella, coloqué mi cabeza entre mis piernas respirando pesadamente. ¿Qué debo hacer?

Escuche pequeñas risas afuera y fruncí el ceño, luego su molesta voz.

-Si, y como una perdedora se fue a esconder a los baños-rió Toddy con su voz de niña mimada, fruncí mis labios-¡Daba tanta pena! Pobrecita!

Apreté mis puños y le quite el seguro a la puerta, abrí y camine a ella con pasos lentos y relajados, al llegar sonreí.

-¿Hablando de mí, Todd?-dije con una sonrisa-Ay, ya sabía yo que sin mi no eres nada.

Ella detuvo su risa y me miró de arriba a abajo.

-¿Y tú que cosas dices, niña?

-Naaaaaada. Todd, ja. Eso suena a hombre-me reí internamente.

-¡Es Toddy!-se metió Fress.

-No te hable a ti-explique y miré a Toddy-Deja de hablar de mi, si no sabes lo que ocurre Todd, sé que tu vida es aburrida y debes distraerte haciendo algo, pero, si vas a joder, a alguien más.

-Mi vida no es aburrida-dijo indignada-Tengo a Foxy y eso es suficiente.

-Ja, tienes a Foxy, cállate.

-¿Te duele?-pregunto con voz victoriosa.

-Noup-mentí. ¿Porqué me dolía? No entendía-Estoy bien.

-Tus ojos mienten-dijo burlona Fress, arrugue mi nariz-Sabemos todo Meg, ¿qué harás si corren a tu preciado maestro Foxy de la academia? No lo volverías a ver, solo Toddy y perderías todo con el, te odiaría de por vida por quitarle su trabajo.

-Última advertencia-dijo Toddy totalmente seria-Aléjate de él.

-A mi no me amenazas...-dije cayendo en la realidad con la voz realmente baja.

-Creo que ya lo hice-dijo encogiéndose de hombros y sonrió-No querrás ganarte su odio, ¿verdad?

-Yo no haré nada para ganarme su odio, Toddy-respondí abrazándome.

-Eso dices ahora, ya quiero ver como pierde su trabajo por ti-dijo Fress haciendo un puchero con sus labios- Pobrecita, ¿te duele la verdad?

-No es una burbuja, Meg-dijo Toddy sonriendo, pero seria a la vez.

-Ahg, son insoportables-murmuré herida pero no lo mostré-No las soporto.

Me fui de ahí a mi departamento. ¿Foxy...me odiaría? ¿Si llego a liarme con el...le quitarán su trabajo? ¡¿Sería mi culpa?! ¡Rayos! ¿Qué hago?

Justamente chocó con alguien, ¿porqué siempre chocó con las personas?

-Oh,Meg cuidado-me dijo Foxy tomando mis manos.

-Ah, Fo-Foxy-me sonrojé.

-¿Tienes fiebre?-preguntó preocupado y extrañado.

-Nooooooo-alargué mucha la ''o'' y me sonrojé más-Sólo...calor...

No se si lo malinterpreto pero sonrió de forma rara.

-No te preocupes, ¿sabes que tenemos albercas enormes aquí, no?-asentí-¿No quieres ir un rato? ya sabes, a tranquilizarte, ayer fue muy pesado-dijo volteando su mirada.

-Ah, sí...cla-claro-dije seria y triste.

¿Por qué pienso y duele tanto lo que Toddy me dijo? Foxy es mi maestro, no me importa si pierde su trabajo o no...

Pero no soy egoísta, por más que lo intento...

No puedo ser mala con las personas.


 Enamorada De Mi Maestro ↠FxM↞Where stories live. Discover now