Not Planned.

Capítulo 2

Se removió un poco en las sábanas y sintió su cabeza punzar en dolor. Probablemente la alarma sonaría dentro de unos minutos. Dios, hoy sería un largo día, la resaca la iba a matar. También sentía un dolor en cada uno de los músculos de su cuerpo, como si hubiera tenido una sesión fuerte en el gimnasio, pero su corazón fue que sintió el golpe más grande cuando un brazo que no había notado afianzó su agarre en su cintura.

Abrió los ojos de golpe y observó la mano adherida a su cuerpo cubierto con la sábana. Al voltear su cabeza con temor, ella ya sabía con que rostro se encontraría, todo estaba claro en su memoria, cada una de las cosas había hecho la noche anterior. No podía creerlo.

El rostro de Mark era pacifico, su cabello gris estaba desordenado y sus labios aún estaban un poco más rojos e hinchados de lo usual.

¿Qué iba a hacer ahora? Se había acostado con Mark, ¿Cómo pudo ser capaz de algo así? Él tenía novia. Esto estaba mal, estaba muy mal. El alcohol le había hecho una mala jugada y ahora lo estaba pagando. Ella no podía negar que hace mucho que no podía dejar de pensar en él y quería esto, pero no de esta forma. No traicionando y jugando sucio, no cuando sabía que esto solo era una aventura para Mark, un error de una noche provocado por la ebriedad. Ella lo deseaba, pero no a ratos.

Con extremo cuidado y lentitud levantó el brazo de Mark para apartarlo de su cuerpo y ponerlo en la cama. Afortunadamente no hizo ningún movimiento, pero cuando se levantó de la misma forma delicada de la cama se paralizó por un momento cuando él relamió sus labios y soltó un gran suspiro, pero también corrió con la suerte de que no despertó sino que simplemente se dio la vuelta, acostándose boca abajo.

Una pequeña sonrisa se formó en sus labios cuando lo observó de esta manera, la nostalgia apoderándose de ella porque jamás pensó que lo tendría en su cama de nuevo, pero cuando recordó toda la situación sacudió su cabeza. No habían palabras que describieran lo mal que estaba esto. Sintió un poco de pena cuando notó todos los rasguños que Mark tenía en su espalda, definitivamente no había sido nada gentil.

Caminó de puntilla por su habitación y tomó una ropa cualquiera con extremo cuidado en no hacer ruido y salió de allí, no sin antes darle una última mirada al hombre que dormía en su cama, el hombre que amaba, pero no era suyo.

Se vistió en el pasillo antes de bajar las escaleras y una voz aguda la hizo pegar un brinco nervioso.

–Oh, lo siento. No pretendía asustarte–April se disculpó cuando vio la reacción de Lexie.

–Está bien. Yo... yo solo me estaba yendo–la castaña no podía controlar su nerviosismo.

–¿No quieres ducharte primero? Ya usé el baño y milagrosamente está solo. Todos siguen durmiendo, nos excedimos un poco con en alcohol y creo que la mayoría llegará tarde–April soltó unas risitas.

–No no, ya voy tarde, así que mejor tomo una ducha e-en los vestidores.

–Aemh, está bien...–April frunció el ceño debido a la actitud extraña de Lexie–. Aunque pensándolo bien, tú te fuiste a la cama temprano, ¿no? No te volví a ver."

–S-si si, es que ya me había excedido con el tequila y trabajo temprano hoy y, y ya voy tarde, April. Adió–Lexie respondió, alejándose lo más rápido posible de la pelirroja para salir de la casa inmediatamente.

–Adiós–April dijo cuando Lexie ya ni siquiera estaba allí y sacudió la cabeza.

*

Un sonido molesto e insistente hacía que su cabeza doliera. Se revolvió en las sábanas y estiró su mano para apagar la alarma del reloj, aún sin abrir los ojos, pero cuando el olor inconfundible de las sábanas entró en sus fosas nasales recordó todo y no pudo evitar hacerlo. Se sentó y dejó que su mirada recorriera la habitación en la que se encontraba, una que conocía muy bien.