Replay • Taehyung •

둘

La espalda de Hyejin se estampó contra la puerta de la habitación. Levantó la vista y se cruzó con los pozos dilatados de Taehyung, tan brillantes, tan hambrientos de ella, hambrientos de sexo.

Con posesividad, Taehyung abordó su boca, fundiéndose en un beso que delataba el deseo que sentía por ella, lo mucho que la había extrañado estando fuera; un beso con el que prometía compensarle por los cuatro meses de ausencia. El chasquido de sus labios nunca le había parecido tan meramente excitante como en ese momento, donde era el único sonido percibido por ambos. La lengua de Taehyung se abrió paso entre la boca de su novia, comenzando una lucha de lenguas donde ninguna de las dos daba tregua. Hyejin recordaba lo bien que sabía, lo bien que se sentía y lo mucho que le encantaba.

La diestra del rubio viajó hasta el costado izquierdo de Hyejin, subiéndola un poco más, encontrándose con la suave y tersa piel de su novia y contrastando la temperatura de su piel caliente con su fría mano. La piel de la castaña se estremeció ante ese leve roce, a la par que sus bocas seguían devorándose como si no hubiera un mañana. Taehyung acunó con su mano el seno izquierdo de su novia y lo masajeó con tanto mimo como la primera vez que lo había hecho. Sus dedos se encontraron con el erguido pezón de Hyejin y lo pellizcó con su índice y su pulgar. La espalda de Hyejin se arqueó, haciendo que su pecho rozara con la camisa negra que Taehyung llevaba e interrumpió su beso para soltar un suave gemido que provocó una sonrisa en Taehyung. Este aprovechó los labios entreabiertos de la castaña, para tirar del inferior con sus dientes; gesto que provocó una sonrisa juguetona por parte de Hyejin.

Sin perder tiempo, Taehyung movió su otra mano para poder estrujar ambos senos entre sus manos. Los delgados labios de Taehyung se deslizaron desde los labios de Hyejin por todo el largo de su mandibula, recorriendo la parte baja de su clavícula, pasando su lengua sobre el lunar en el cuello de lado izquierdo que tenía. Hyejin jadeaba cada vez más. 

El creciente bulto de Taehyung comenzó a hacer acto de presencia en el bajo vientre de Hyejin. Las manos de la castaña se dirigieron hacia el cabello de su novio, y enredó sus dedos entre las hebras suaves. Levantó el cuello, acción que le dió más espacio a Taehyung para mover su sinhueso por toda la extensión de su piel quemando de lo caliente que se encontraba en ese momento. 

Una de las manos de Taehyung se deslizó por todo el vientre de Hyejin, hasta tocar el borde de las bragas rosas de su novia. Hyejin soltó un jadeo cuando sintió cómo dos dedos apartaban la tela de su centro y dejaban que los dedos índice y corazón tocaran sus pliegues. Un suave bufido se escapó de los labios de Taehyung, a la par que empezaba un vaivén rápido que hizo que Hyejin soltará pequeños gemidos que incrementaron su volumen a la par que incrementaba su rapidez. 

—No tienes idea de lo mucho que te extrañé —susurró Taehyung al oído de Hyejin, mientras sus manos continuaban a propiciarle el placer que su novia tanto había estado anhelando y esperando.

—¡Agh, sí Taehyung! —exclamó Hyejin, a la par que su mano derecha arrugaba la tela de su camisa blanca de su novio entre sus dedos.

Los labios hambrientos de Taehyung se encontraron con los de Hyejin y dieron inicio a un beso cargado de lujuria y de deseo, donde los chasquidos que provocaban sus lenguas se escuchaban tan excitantes. Taehyung retiró sus dedos del interior de su novia, acción ante la cual Hyejin protestó. Estuvo a punto de cuestionarle a Taehyung el motivo de su liberación, pero su boca ahogó un jadeo cuando Taehyung estampó su mano izquierda contra su nalga, y su mano derecha desabrochó su sostén con una agilidad que hizo que las bragas de Hyejin se empaparan, si era posible, un poco más. El sostén cayó por inercia, y dejó libres los redondos pechos de Hyejin, con sus pezones apuntando firmemente al frente. Su lengua no tardó ni tres segundos en atenderlos, en morderlos, chuparlos y dar pequeños tirones con sus dientes que solo permitían que Hyejin suspirara. Dejó un rastro de marcas desde la parte baja de su pecho hasta arribar al monte de venus de Hyejin y ponerse en cuclillas frente a sus bragas rosadas. Su respiración caliente chocó con el bajo vientre de Hyejin. Con una parsimonia que a Hyejin le desesperó, Taehyung bajó delicadamente la tela rosada de encaje y dejó que cayera por las piernas de la castaña. Una ola de calor abordó todo el cuerpo de Hyejin en cuanto estuvo desnuda frente a los hambrientos pozos oscuros de Hyejin.