Infinita

Prólogo

"El tiempo es relativo y serás infinita"

- El amor de mi vida

____________________________________

CAMILA Y LAUREN

Era un bello día de verano, hacía un clima delicioso y Camila Cabello no podía pedir nada más de lo que estaba disfrutando en ese momento; Se encontraba en Londres; la ciudad en la que vivía desde hacía un par de años atrás, en uno de los eventos literarios más importantes, tenía el mejor asiento y estaba a punto de escuchar a su escritora favorita leer el primer capítulo de su más reciente obra.

Frente a ella, se levantaba un pequeño y bonito escenario, del tipo hogareño; maderas adornaban su al rededor en forma de una vieja cabaña al estilo rústico. Al fondo había un par de sofás, uno individual y otro un poco más largo, exactamente con cabida para tres personas, lo suficientemente cómodos para tener una conversación con un aire casual, acompañados por un par de mesitas que por encima tenían botellas de agua y libros en cada una. La pequeña e improvisada habitación era más un tipo de sala de estar que un set para entrevistas. Sin embargo, al centro del escenario, estaba un discreto estrado, en el cuál cada autor tendría la oportunidad de hablar acerca de su nuevo libro y exponer al público presente el primer capítulo, obviamente leído por ellos mismos.

En el pequeño sofá se encontraba sentada la crítica de literatura juvenil Dinah Jane Hansen, quien resultaba ser la mejor amiga de Camila desde la infancia, terminando con la entrevista publicitaria de la que Lauren Jauregui, de quien era asistente y amiga, formaba parte junto con otro par de escritores que, al igual que ella, estaban por lanzar sus nuevas obras. Minutos más tarde, se encontraban escuchando al primer escritor narrar el primer capítulo de su nuevo "bebé" como él lo había llamado.

Mientras Camila se perdía en la preciosa vista de la que gozaba por estar en primera fila, Dinah daba las gracias al segundo escritor y todo el público aplaudía en agradecimiento, entonces, el momento de que Lauren pasara al estrado llegó. La chica que le gustaba resplandecía como si fuera un rayo de sol en una mañana de invierno: más cálida que una taza de chocolate y bombones, mientras que en su rostro se dibujaba una sonrisa de oreja a oreja que brillaba cual perlas recién pulidas a juego con sus pendientes.

"Es preciosa", pensó Camila.

Los nervios de su escritora eran más que notorios y lo esperaba, hasta hacía unas semanas estaba completamente segura de que ese libro sería el ideal para el evento. Sin embargo, Camila no tenía idea de qué la había hecho dudar. Ya lo tenían todo planeado, previsto y demás.

Aunque muy en el fondo nuestra chica sabía perfectamente que estaba engañándose con eso. Claro que era consiente del motivo de su inseguridad y lo confirmó al notar que esos preciosos ojos verdes que ella tanto anhelaba se iluminaban frente a las butacas en las que se encontraba sentada.

Le hubiera encantado ser ella el motivo.

FLASHBACK ___________

» Hace una semana

- No entiendo qué es lo que te sucedió. -Dijo Camila con tranquilidad mientras Lauren daba vueltas por la pequeña sala de estar del apartamento que compartían imitando a un león enjaulado.

Ambas chicas tenían cerca de dos años viviendo en Lóndres debido a que Camila obtuvo una beca para un programa de fotografía que la impulsaria en su carrera a penas naciente y Lauren, por supuesto, la apoyó en todo momento, incluso viajó con ella hasta el viejo continente para acompañarla con la excusa de querer hacer crecer su ya establecida carrera como escritora y así ampliar sus horizontes también en Europa.