Magical Begin || kth×jjk

VI

Taehyung intenta cerrar su bolso en medio de la estación, sentado sobre ella salta tratando que todo quepa mientras Jungkook lo mira con una ceja alzada y sus cosas en mano.

—Vas a romperlo si lo sigues haciendo por la fuerza... Déjame ayudarte.

—Para nada, ya casi lo consigo.

Suyeon niega en un suspiro y se agacha para ayudarle a pesar de las quejas de su hijo—. Deberías escuchar a Jungkookie, ¿qué tranquilidad me das si sé que te vas y no vas a dejar que te ayude?

— ¡Pero es un cierre mamá! —Se queja, la mujer acaba por dejar todo como nuevo y le mira con ambas manos en la cintura—. ¿Y desde cuando ustedes dos complotan en contra mía?

—Desde que hay marcas de pisadas en el techo de la casa por ciertas visitas que hubo —contesta risueña al ver el arrepentimiento en los jóvenes—. A partir de ahora somos socios en todo como prueba de lealtad.

—No me gusta como suena eso —resopla y mira a su padre—. ¿Vas a dejar que me avergüencen así?

— ¿Tengo otra opción? —Dongjun se encoje de hombros y palmea la espalda del menor, ganándose una sonrisa tímida—. Ya hemos acordado que él nos llamará porque no confiamos en que te acuerdes de levantar el teléfono, también será el encargado de mandarnos fotografías— Tae rueda los ojos sin poder creer lo que oye, Kook asiente sintiéndose a gusto por ser el reportero oficial del mago en su aventura de la ciudad—. Promete que le harás caso, ¿de acuerdo?

— ¡Papá! Es mi novio, no mi niñera, joder —se revuelve el cabello, los adultos carcajean por sus ocurrencias y el modo en que los chicos parecían desfallecer de vergüenza siempre que se comportaban de ese modo. Hye, por su parte, observa la situación con calma; Taehyung busca apoyo en ella y señala a sus padres—. Abue, necesito ayuda aquí...

—Pero cariño de qué hablas —aprieta los cachetes del azabache menor quien cierra los ojos para no quejarse del dolor—, yo también estoy angustiada de que vas a volar del nido y no puedes ni cerrar una maleta. Jungkook querido, ¿lo vigilarás cierto?

—Lo haré abuela Hye, usted y todos pueden estar seguros de que él estará bien— hace una reverencia pequeña, los mayores curvan los labios complacidos por sus palabras. Taehyung por su parte no ve la hora de irse para dejar de escucharlos, no falta mucho para partir pero su mejor amigo aún no aparecía y estaba comenzando a impacientarse.

—Te ves tenso hijo.

—Jimin no ha llegado, si me voy sin saludarlo no pienso traerle ni una de las cosas que me pidió—su padre alza las cejas como si estuviera asombrado por la carga de maldad que tenía su hijo, Tae ni siquiera tiene ganas de discutirle.

En eso su nombre se escucha por cada parte de la estación como un eco, voltea hacia la entrada y ve la mano en alto del de cabello rosa mientras se acerca corriendo arrastrando consigo a un chico un poco más bajo que él. Cuando llegan recuperan el aliento, Taehyung le recrimina apenas lo tiene en frente suyo.

— ¡Tarde Park! Casi me voy y estabas por quedarte sin regalos.

— ¡Faltan cinco minutos para que llegue el tren! —Extiende las manos indignado—, y si se te ocurría irte sin saludarme podías irte despidiéndote del titulo de mejor amigo.

—Estoy temblando —lo mira inquebrantable, Jimin sonríe exageradamente y Kim se rinde para abrazarle de una vez—. Veo que trajiste a-

— ¡¿Yoongi hyung?! —Jungkook se cubre la boca exaltado y corre los dos pasos de distancia para tocar las hebras verdosas, completamente fascinado—. ¡¿Tú eres el novio de Jimin?! No... más importante, ¡¿Jimin logró convencerte para que te tiñeras?!