No me dejes solo. (MALEC)

Capitulo 27.

Primer día de universidad, Jace y yo escogimos la carrera de lengua y literatura, nos arriesgamos, aún que no prometía nada... quería ser feliz en mi carrera.

Jace y yo quedamos en el mismo salón.

-Jace: Bien, es tiempo.

-Si, después de esas vacaciones.

-Jace: Si... es hora de esto. Al fin y solo perdimos un año.

-Un año no es nada.

-Jace: Izzy también estaría aquí.

-No me a llamado y su cumpleaños fue hace 4 meses.

-Jace: ¿Por qué no vamos a buscarla?

-Papá se mudo a no sé donde, cambio los teléfonos de todos y si ella quisiera sabe donde estoy.

-Jace: Lo siento.

-Yo también y Jonathan también su primer día de universidad.

-Jace: ¡Si! Ahora esta en ella, se queda en los dormitorios.

-Eso es genial.

-Jace: si, odiaba vivir con su madre.

-Espero que venga de visita o nosotros vayamos.

-Jace: Claro en la primeras vacaciones iremos.

Después de un mes ya nos habíamos acostumbrado a no dormir casi, trabajar llegando de la universidad y en las noches hacer las tareas, era demasiado pesado.

Los fines de semana seguíamos trabajado, no parábamos ni un día.

Era sábado, llegaría Jem de visita, irían por el los Branwell y Jace por las chicas, yo me quedaría a vigilar todo.

-Jorge: Nuevo día jefe.

-y con toda la actitud positiva.

Lo dije sin ningún animo de la vida, tenía mucho sueño.

-Jorge: Estudiar y trabajar lo más hermoso.

-Lo sé.

-Jorge: ¿Ya tomaste café?

-Si, dos tazas, tengo que sonreír para los turistas.

-Jorge: ¿Por qué no dejas que Carol se haga cargo de eso y tu me ayudas a cortar los frutos?

-¿Por qué?

-Jorge: Carol tiene la cara más fresca y no parece un mapache.

-¡Hey!

-Jorge: Es la verdad.

-Bien, haré eso.

-Jorge: ¡Le mando a mi jefe!

-Jodete.

El se rió, Jorge se reí sin pena, no era dulce ,ni perfecta pero era la suya y real.

Vi el auto llegar, Jem había llegado no quería ser dependiente a el como lo fui en mi antigua relación, me gusta que tengamos nuestro espacio pero lo extraño mucho.

-Jorge: Tu cara de idiota.

-¿Se me nota?

-Jorge: si, demasiado, ¡y luego decías que no querías estar con Jem!

-Olvidemos eso.

-Jorge: Bueno sigamos o yo me iré y tu acabarás de cortarlos.

-¿Ahora tu me mandas?