Mi Alma Gemela (Allward)

Amor en secreto

Pov Ed.
Pasaron 3 días después de esa confesión que le hice a Al, yo estaba enamorado de Allen y nada me impedía amarlo en secreto cosa que hice,sin embargo no podía evitar sonrojarme, en frente de él,sin embargo hay algo que no pinta bien, el otro día estaba comiendo con Al y de repente no se de dónde salió esa cosa amarilla que Allen siempre trae siempre me pregunté si no era su mascota, pero volaba y se escondía de mí, me molesté y no se porque, pero fui rápidamente, ese objeto amarillo se fue volando a toda velocidad pero de alguna manera lo tenía en mis manos, –Al fin te tengo cosa amarilla así que no me importa que pase contigo.
–Oye Ed ¿Que es eso?
–no lo se, pero Allen siempre lo trae consigo.
–No sera su mascota.
–Tal vez tenga una cámara escondida –dije examinándolo, sin embargo Allen apenas había llegado al comedor.
Pov, autora.
Allen estaba preocupado porque no encontraba a Timcanpy, lo buscó en todas partes, hasta debajo de la cama pero no lo encontraba hasta que resignándose mejor se fue al comedor, pero cuando estaba por pedir su gigantesco banquete encontró a Ed sosteniendo a Timcanpy, con cierto desdén, Allen salió corriendo y tomando a Timcanpy en sus manos.
–Timcanpy, así que estabas aquí... Estuve preocupado por ti te busqué en todos lados –dijo Allen, casi dando el segundo diluvio, Ed simplemente lo miro extrañado.
–¡¿Que le hiciste a Tim?!– preguntó Allen viendo fijamente a Ed.
–¿Quien, yo? Nada – respondió Ed apresurado y tratando de poner esa escusa sin embargo comenzó a darle la contraria, porque se empezaba a sonrojar.
–Sólo que me encontré esa cosa viéndome y me empezó a incomodar –dijo Ed totalmente sonrojado.
–Bueno pero no creó que debas tocar nada sin permiso y menos si no es tuyo– dijo Allen, mirando a Ed amablemente, pero este estaba muy sonrojado.
–¡No es necesario que me lo digas yo no soy un niño aunque tal vez lo parezca!– dijo Ed aún sonrojado aunque estaba rojo como tomate.

Allen simplemente se fue, no sin antes dirigirle una sonrisa, Al se acercó lentamente a Ed y le susurro en el oído –Ed todo se te esta saliendo de control en lo menos que te esperes, estarás entre sus brazos.
–¡¡Y a ti eso que te importa!– grito Ed a Alphonse haciendo que todos los presentes voltearan a verles.
–Shhhh!!!... Ed así terminarás por descubrirte, y todos se enterarán – dijo Al tratando de calmar a su hermano, fueron a al cuarto de Al, a darle algo de comer a los gatitos, y a hablar sobre ese gran problema de ojos plateados y cabello blanco llamado Allen.
–Ed, será mejor que te olvides de él, últimamente te notó más callado que nunca.
–De que hablas Al, yo nunca me distraigo– dijo Ed, sin despegar la vista de los gatitos, sin embargo algo pasó por su mente, se imaginó a Allen sonriendole y acercándose más a él dándole un tierno beso , una escenas cubierta de flores y corazones como se diría todo era color de rosa, sin embargo Alphonse vio a Ed tan embobado que le interrumpió su hermosa ilusión –¡¡¡Ed, regresa a la realidad!!!
– ¡¡Hay Al, como eres!! Acabas de interrumpir mi bella ilusión con Allen.
–lo vez ahora estas viendo a Allen hasta en tus sueños.
–ya callate, Al es mi vida además nada pasará.
–Si te distraerás de la misión, Ed debes concentrarte olvidalo total Allen jamás se fijará en ti–dijo Al tratando de hacer comprender a Ed, pero eso en realidad lo lastimó.
–Alphonse, ya dejame total si lo amo, lo amo... ¡A ti eso que te concierne!.
–Perdón Ed, pero es verdad Allen jamás te tomará en serió.
–¡¡Callate!!– gritó Ed a Al, saliendo de su cuarto y aventando la puerta en eso llegan Lenalee, Lavi y Allen, observando a Ed muy molesto que se dirigió a su cuarto,(por fin ya no compartía cuarto con Allen), se sentó en su cama y comenzó a llorar, pero obviamente Al tenía razón Allen jamas se fijaría en él, se sintió estúpido al haberle gritado a su propio hermano por defender un amor que no existe.
Mientras en el cuarto de Al,
–oye Al, ¿porque Ed se molesto?–pregunto Allen mirando a Al, sin embargo Al se puso nervioso no podía contarle que Ed se había enamorado y que estaban peleando por eso.
–Es un asunto de hermanos, no es muy importante –dijo Al tratando de que Allen se tragará ese cuento.
–Pero si Ed, estaba tan molesto como Kanda cuando... Esperen Kanda siempre esta molesto –dijo Lavi tratando de relajar el ambiente.
–Bueno la verdad es que, yo dije algo sobre nuestro padre a quien Ed detesta y se molesto.
–cielos, se molesto con eso, bueno aunque en lo poco que llevó de conocerlo, se molesta con todo –dijo Lenalee, mientras Al trataba de que nadie pensará mal en Ed. Sin embargo horas después  cuando todos se habían ido Ed tocó a la puerta de Al, cómo siempre Al abrió la puerta.
–Al, tengo que pedirte que me perdones por gritarte, yo estaba confundido contigo y mis sentimientos, aunque tienes razón debo olvidarme de él... Debo olvidarme de Allen –dijo Ed mientras un par de pequeñas lágrimas salían de sus ojos, Al se sentía triste al ver llorar a su hermano, así que lo abrazo con sus brazos de metal, y susurro en su oído.
–Ed, mejor sigue tu destino si lo amas, simplemente debes hacerlo.
–Pero Al, tu lo dijiste... Que debía olvidarme de Allen.
–no importa lo que importa son tus sentimientos.
–¿Entonces porque me impediste amarlo?
–porqué pensé que lo que tu tienes era un obsesión pero veo que es amor, aunque no estoy seguro de todas maneras es tu vida y porque no quiero volver a pelear contigo.
–yo igual Al –dijo mientras le dirigía una sonrisa a Al.
Mientras en otra parte de la orden.
–Allen, no notas algo extraño en Ed.
–extraño ¿como?
–se sonroja cuando te ve, y ahora acaba de discutir con su propio hermano.
–Son cosas de hermanos Lavi.
–Allen, tu no te tragaste ese cuento y yo lo se bien.
–¿A que te refieres?
–No me contaste que Ed y tu se besaron.
–¡¡Callate!! Además eso fue un accidente, estoy seguro que Ed lo olvido.
–¡Ajá!... Quien te cree Allen, bueno yo ya me voy me empieza a dar sueño–dijo Lavi bostezando, sin embargo antes de irse le susurro algo a Allen en el oído– sera mejor que aproveches ahora porque si no yo te quitare a Ed– dijo Lavi, mientras se reía a carcajadas, sin embargo Allen lo miro con molestia,
–Aja, si como no Ed no se fijaría en ti ni en un millón de años.
–Ya veo así que también te gusta hee– dijo Lavi, mientras le sonreía discretamente y se iba, Allen se quedo sólo observando la luna, y se sintió tan tonto, además había aprendido una lección: no volver a enviar a Timcanpy a espiar a Ed porque si no lo hará todos los días.