- ¿Es cierto que tendrá una niña? - uno de los hijos de Gabriella me pregunta mientras está apoyado en sus manos.

- Así es.

- ¿Cómo se va a llamar señora?

- Se llamara Odette.

- ¿Y podemos jugar con ella?

- Eduardo que te he dicho de preguntarle a la gente adulta cosas inoportunas - Lo regaña su madre.

- Claro que pueden jugar con ella, no seas duro con ellos Gabriella.

- Que tonto eres Eduardo, la hija del señor Bonatti no es una niña con la que podamos jugar,ella va tener otra clase de amigos.

- Claro que no, ella será su amiga, no hay ningún problema en que lo sean.

- Creo que el señor les ha metido miedo - Gabriella ríe con el comentario. Se que Giorgio ha dicho a los cuatro vientos que alejara a cuanto "Inepto" según sus palabras, se acerque a ella.

¿Qué pienso de todo esto? El karma ha hecho de las suyas con él.

- Niños, al patio,con permiso señora - Gabriella se retira de allí y vuelve a dejarme sola.

Para distraerme en la mansión me encargué de realizar el resto de diseños de los vinos, me alegra que el viñedo vuelva a reabrir. Pero me alegra más que Giorgio haya cumplido su sueño.

Parece que todo está bien. A excepción de Dalila. Antes me texteaba con frecuencia, ahora es difícil contactarla. Ella simplemente se alejo.

No se si este bien su matrimonio, su sueño siempre había sido conocer un hombre que la quisiese y le ofreciera cariño y protección. Cosas que papá nunca hizo con ambas en los últimos años que estuvimos viviendo con él.

Amaba a su esposo, pero él no parecía sentir lo mismo que ella, Zeus podía preocuparse por su estado. Pero no era el tipo de hombre que se mostrara cariñoso con ella. Al contrario actuaba frío las veces en que estaban juntos.

Se que mi hermana es fuerte, se que no es de las que se dejen pisotear, pero también es frágil en cuestiones del amor. Es dulce e inocente, tiene la fé de que puede cambiar las cosas.

Mi mamá siempre decía que ella era el ángel de la casa, yo...bueno, era la oveja negra de la familia.

Espero que este bien, de lo contrario tendré que hacer una visita a Atenas.

***

- ¿Podrías pasarme la pañalera?

- ¿Dónde está? - Giorgio está desesperado porque la bebé ya está a punto de nacer y en su afán no encuentra las cosas que se supone debían estar listas en caso de emergencia,como este caso.

- Debajo del mueble - ruedo los ojos.

- Ya la encontré - la toma en sus manos y me ayuda a salir de la habitación-. ¡Massimo! Prepara el auto ¡Massimo!

Giorgio me está terminando de estresar, es como un niño, grita por todos lados.

- Quédate tranquila amore.

- Si sigues gritando no lo voy a estar,dame eso - tomo la pañalera y salgo hasta la entrada de la casa.

- Aless espera ¿Qué haces?

- Subiendo a otro auto ¿Quieres que tenga a mi bebé acá como si.. ¡joder! Duele. ¡Rápido abre la puerta!

- Si, Si - camina de un lado a otro.

- Del otro lado Giorgio.

¿Ay Dios porque me diste un esposo tan torpe?

- Ya está.

Deseo ItalianoWhere stories live. Discover now