Entre arreglos y besos

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Ya habían pasado tres semanas desde que Blas le dijo a Junior lo del viaje. El menor trabajaba de Lunes a Sábado, feliz, pensando en ello.
Se levantaba cada mañana, dos horas después que su novio, para desayunar y prepararse con tiempo. Siempre hacia la picardía de levantarse a la misma hora de Blas para mirarlo ducharse sin que el supiera, y luego volvía a dormir dos horas mas.
Llegaban mas o menos a la misma hora. Siempre cenaban juntos. Cada tanto peleaban, alguna que otra discusión pero todo era distinto a lo que era hace unos meses. Los dos habían madurado.  Habían decidido convivir juntos para luego mudarse a un pequeño departamento que alquilaba Blas cerca del bar de Dante.  Le venia bien para su trabajo y quedaba cerca del hogar también.

Ya era casi Noviembre cuando empezaron a averiguar por lugares, fechas y vuelos. Habían decidido irse en Enero.
Era un Viernes a la noche de lluvia torrencial, con los primeros calores fuertes del año y un viento que entraba como correntada por las ventanas que Blas siempre dejaba apenas abiertas.
Se acostaron en la cama con la computadora en mano viendo paginas y paginas de viajes. Lograron después de 4 horas de búsqueda concretar todo y organizarlo bien. Faltaba los últimos detalle cuando Junior tomo la computadora, archivo las paginas para no perderlas y la apagó, cerrándola para dejarla sobre su mesita de luz, sin emitir palabras.
- Porque apagaste?- se digno a preguntar el mayor.
- Porque hace meses que venimos trabajando y no disfrutamos un ratito juntos no te parece?- le respondió Junior para agarrarlo por la cintura y acomodarlo en la cama.
- Tenes razón- dice Blas mirándolo pervertidamente para luego atrapar sus labios carnosos que tanto amaba besar.
Junior le siguió el beso con todo el deseo del mundo mientras se subía arriba de su novio.
Blas lo acomodo para que sus erecciones se rocen y el menor gima de placer.
Amaba verlo así, disfrutando de su sexualidad a pleno sin vergüenza ni miedo. Hicieron el amor después de mucho. Se sentían plenos.
- Te amo pendejo, me haces tan feliz- dijo el rizado mientras se le escapaba una sonrisa enamorada
- Yo te amo a vos, gracias por aparecer en mi vida-
Ambos cayeron dormidos con el ruido de la lluvia de fondo.

"Como te lo prometí" -Blasnior. [terminada]Where stories live. Discover now