|6|Dominio total de la primera prueba

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Al día siguiente, Amanda regresó a la escuela un poco más tranquila

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Al día siguiente, Amanda regresó a la escuela un poco más tranquila. Ingresó a su salón donde se encontró con Caled.

—Hola—lo saludó—. Quería darte las gracias por llevarme a la enfermería ayer—le agradeció.

—No tienes nada que agradecerme, lo hice con mucho gusto—le respondió con ese brillo rojizo en sus pupilas.

—¿Te parece si nos reunimos hoy durante el recreo para avanzar con nuestro trabajo?—le preguntó hipnotizada .

—Claro sería un placer—le respondió él con una leve sonrisa.

En ese momento Alex entró al salón acercándose a ellos.

—Hola preciosa—saludó a Amanda con un beso en los labios.

Ella se sonrojó con su gesto, pero el maestro hizo su aparición para dar comienzo a su clase. Amanda y Alex tomaron sus respectivos lugares, Caled los observó con rabia, aunque quería matar a Alex no podía hacerlo, ya que tenía que encargarse de otras cosas que incluía al tio de Amanda.
Durante la clase ella estaba anotando lo escrito en la pizarra, pero su concentración se fue al piso, cuando comenzó a ver que las paredes que tornaban de color rojo, de ellas salían cucarachas, gusanos y sangre. Estos insectos se desplazaban por doquier, el piso estaba cubierto por una capa de lodo, los rostro de sus compañeros y maestro cambiaron por completo: en lugar de ojos habian dos grandes agujeros de donde salían sangre, de sus bocas salían una mezcla de insectos.

Ella cerró los ojos como lo había hecho con anterioridad; sin embargo, cuando los abrió la imágen no había desaparecido. Con su respiración y corazón acelerado decidió respirar hondo y tratar de calmarse. Se quedó estética en su asiento. Levantó su cabeza para mirar los espectros frente a ella, tomó valor y los miro fijamente, poco a poco se fue acostumbrado a ellos, pasaron varios minutos de los cuales su respiración se fue controlando junto a sus nervios y miedos. El timbre se hizo escuchar en ese momento: la clase había finalizado sacándola así de su experiencia paranormal.

***

Las horas pasaron y Amanda no volvió a tener otra visión,
aunque se sentía un poco asustada, algo dentro de ella le dio el valor de no tener miedo. Se reunió con Angélica para saber cómo seguia después de la traición de su novio.

—Miralos, los muy descarados pasan exhibiéndose sin pudor—le mencionó Amanda guardando su libro en su casillero para sacar otro, que iba a necesitar para las anotaciones del trabajo en pareja. Angélica no soportaba verlo juntos. No pudo evitar deprimirse, todavía amaba a Brian—.No vale la pena que sufras por él amiga. Pronto encontraras a alguien quién de verdad te ame—le dijo para animarla.

Su amiga se secó las lágrimas que se habían escapado de sus ojos.

—Gracias, eres la mejor—-le respondió Angélica abrazándola—. Dime, ¿Cómo te fue en tu cita con Alex?—le preguntó una vez calmada.

Amanda sonrió ante su pregunta.

—Muy bien, me pidió que fuera su novia y le dije que si—le respondió alegremente.

—¡No puedo creerlo, ya tienes novio, felicidades!—le dijo muy emocionada.

Después de algunos minutos de detalles de su cita. Amanda se dirigió a la biblioteca donde Caled ya se encontraba en una de las mesas vacías con unos cuantos libros.

—Me tome la libertad de buscar algunos libros mientras llegabas, ¿Quieres verlo?—le preguntó amablemente.

—Si, por supuesto—le respondió ella mientras tomaba asiento.

Después de unos minutos de seleccionar el país que expondría,recopilaron la información que necesitaban.

—Solo falta hacer la estructura del informe escrito y estudiar la parte que nos corresponde para la exposición—mencionó ella cerrando los libros.

En ese momento Amanda volvió a tener una la mismas escenas visuales que querían seguirla atormentando. Cada alumno que se encontraba en la biblioteca comenzaron a tomar fuego, sus cuerpos se quemaba por las inmensas llamas, el lugar completo comenzaba a caerse. Ella respiró hondo y no despejó su mirada de todas las escenas que estaba mirando: Estaba comenzando a dominar su miedo.

Caled que estaba frente a ella la mira con una sonrisa, él podía ver lo que Amanda veía, aunque en realidad nada de lo que veían estaba ocurriendo. Él, sonrió satisfecho, Amanda dominaba completamente la primer prueba, pero sólo era cuestión de tiempo que la segúnda comenzará. Las imágenes terminaron, Amanda regresó a la realidad. Observó a su alrededor donde todos estaban un sus labores con normalidad, luego observó a Caled quien la miraba fijamente con ese brillo rojizo en sus pupilas.

—¿El color de tus ojos siempre han sido asi?—le preguntó ella con curiosidad.

—Si, siempre—le respondió él con una leve sonrisa—. Algunos dicen que este color les recuerda al fuego del infierno, dime ¿Le tienes miedo al infierno?—le preguntó Caled en un tono escalofríante.

Ella abrió la boca para responderle, pero Angélica había llegado para que se fueran a su próxima clase. Amanda se despidió de Caled un poco aturdida.

***

El día finalizó rápidamente, Amanda se encontraba en su casa lista para ir de compras con su madrastra y su tía, pero escuchó voces algo alterada en la parte de abajo.

Encontró a un policía en la entrada de la casa y a su tía llorando sin parar, Susana estaba abrazándola para darle consuelo.

—Susana, ¿qué ha pasado?—le preguntó.

—Tu tío murió en un accidente de auto—le respondió con tristeza—. Al parecer tuvo un paro cardíaco mientras conducía—-le comunicó.

Amanda no podía creer que su tio Fernando estuviera muerto, pensó en su primo Gustavo, él se pondría muy mal cuando se enterará de la noticia.
A pesar de que ella no tenía ningún tipo de afecto hacia su tío, le iba ser falta sus encuentros casuales en su habitación, pero ahora que tenía a Alex, pensó que esa parte estaría resuelta, sonrió ante su pensamiento.

Por la noche en la funeraria Amanda observaba a su familia y amigos más cercanos muy tristes por la muerte de su tío. Para ella era un alivio que estuviera muerto, eso le garantizaba que su secreto jamás saldría a la luz y eso la hizo sonreir. Ahora le tocaba, fingir que le dolía su muerte frente a todos los demás. Cómo la buena actriz que era aceptaba los pésame y mensajes de consuelos de parte de los recién llegados.

Caled: Un Amor InfernalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora