Me dejaste
Me dejaste con el pantalón que tanto quise modelarte y aquellos braciles de encaje que compre para ti me quede aun más con esas ganas de ser tuya así fuera por minutos.
Me dejaste con el alma hecha pedazos y las piernas bien abiertas, me dejaste con el rimer corrido y un par de lágrimas que no quise dejar salir.
En ese momento me sentí desechada como juguetito viejo tirado a la basura, mas nuevamente me jure y quizás para siempre no permitir que me volvieras a dejar pero mucho menos dejarte regresar.