Esencia Rusa

Epilogo

- Sólo quiero saber si están durmiendo - el ruso rueda los ojos y marca desde mi móvil el número de Tiffany.

- No, hablas con el señor, ¿Los mellizos duermen? - Me da una sonrisa y asiente-. Llamanos si despiertan o si se quejan- cuelga la llamada y me mira-. Duermen como dos ángeles.

- Eso es tan tranquilizador - suspiro.

- Ross llamaste hace menos de cinco minutos preguntando lo mismo.

- Son mis bebés - hago un puchero y él me toma de la cintura, me besa apasionadamente y en respuesta me inclino de puntitas tratando de igualar su estatura, es imposible mi esposo es demasiado alto.

- Reserve un cuarto de un hotel con una increíble vista.

- ¿No bastó con el apartamento? - levanto una ceja.

- Sabes que no podemos hacer nada con los bebés durmiendo - una sonrisa se dibuja, mi e tras me toma de la mano y me dirige al auto en compañía de Viktor que nos abre la puerta.

Emma ha salido con él varias veces, y creo que tienen algo, la ultima vez que me visito los sorprendí saliendo juntos del cuarto de lavado. La cara de vergüenza de ambos fue digna de admirar. La morena termina aceptando que había tenido un pequeño encuentro sexual allí.

El auto conduce hasta el hotel, una vez estamos adentro tomamos la tarjeta y subimos a la suite, entramos en ella y esta esta adornada por rosas amarillas,las rosas amarillas más hemosas que he visto en mi vida.

En la pequeña mesa del centro hay una botella de champagne y un pequeño tarro de Nutella.

Me acerco hasta el y lo tomo en mis manos.

- Caiste directo a la trampa - me rodea con sus brazos y me sube encima de la mesa,mis piernas rodean su cintura, impidiendole que se mueva.

- Te tengo - una sonrisa se escapa de mis labios mientras el me pega más a su pecho, une sus labios a los míos, introduciendo su lengua en mi boca trazando círculos dentro de ella, siento su erección rozando mi parte íntima. Sus manos se dirigen a mi espalda y emepiza a bajar el cierre de mi blusa dejando al descubierto mis senos en ropa interior.

- El embarazo te sentó de maravilla - su mano se deshace de mi sostén mientras muerde mi pezón, arqueo mi espalda y gimo. Una de sus manos se despliega lentamente por mis piernas se deshace de mi falda dejándome en sólo bragas. Retiro mis labios de los de él, tomo un poco de Nutella y lo vierto en uno de sus costados.

Lamo el chocolate y el cine en respuesta, mis ojos se fijan en lo duro que se coloca su miembro. Levanta mi cabeza y me obliga a verle a la cara. Me apoya en su pecho y me conduce hasta la cama, apoyándome lentamente en ella. Baja con delicadeza mis bragas, a su vez que mis manos bajan su pantalón junto a su ropa interior. Me toma de la nuca y se hunde suavemente en mi, tan lento y torturante. Que tengo que clavar mis uñas en el para que note que lo deseo más fuerte en mi interior.

Capta mi respuesta y acelera sus movimientos, gimo cuando lo siento ma profundo.

-  Correte encima de mi -  muerde el lóbulo de mi oreja y cambia su posición para que pueda moverme atraves de él, aprieta mi trasero mientras sus labios succionan mis senos.

Ahogo en su espalda un grito de dolor, están sensibles aún.

Me muevo de forma rápida y siento como encuentra su liberación en mi interior.

Caigo extasiada encima de su pecho,mi vista se clava en el reloj que hay en la mesa de noche, las once.

Me levanto de la cama y paso mis manos por mi cabello que parece un nido de pájaros.