Capítulo 3.- Orgullo.

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Cierto, la ilustración de arriba fue hecha por este ilustrador:
https://www.deviantart.com/yinyuming

-¡Aaaaaaaaaaaaahhhhhhhg...! -Y ahí lo tenían, cayendo en aquel abismo sin inicio ni fin. Ya habían pasado alrededor de unos cinco minutos desde que Loki entró en aquella extraña dimensión en la cual era una especie de pozo y el cual apenas si tenía algo de luz. Pasaron mas minutos hasta que estos se convirtieron en una hora y nuestro querido Dios del Engaño ya estaba más que cansado, hasta que de repente, apareció el mismo portal que lo había metido en ese extraño lugar y pensó que tal vez por fin saldría de el. Atravesó la abertura que lo llevaría a aterrizar de frente al suelo.

Se quedó tirado unos segundos y cuando por fin se comenzó a levantar con algo de cansancio, miró a su alrededor y se percató de que se encontraba en la que pareciera ser el lobby de alguna antigua mansión. Vio con mayor detenimiento que esa sala tenía algunos artefactos y al parecer de gran valor, pero sobre todo antiguos -¿Dónde estoy...? Se preguntó recuperándose de la larga caída.

-Sabía que vendrías... -Escuchó a lo lejos esa tranquila, pero fuerte voz. Miró a todos lados y cuando levantó su vista a las escaleras las cuales llevaban al pasillo del primer piso y dando vista a los enormes ventanales que daban para la calle, estaba levitando el dueño que aquella voz y sin poner un pie al suelo bajó sin prisa alguna -No es bueno que estés aquí... Te pido que te marches cuanto antes de aquí...

-¿Quién eres tu? ¿Qué es lo que quieres? -Preguntó con seriedad el peli negro.

-Eso debería preguntarte... Loki Odinson...

-¿Acaso ya nos conocíamos?

-No.

-¿Quién te dijo de mí? –Dijo comenzando a perder la calma -¿Fuiste tú quien me arrojó a ese abismo?

-Tal vez... -Aterrizó sus pies con suavidad sobre el último escalón y sin quitarle de vista al chico dijo –Además... Te hiciste de muy mala fama para esta ciudad... Tienes suerte de que la mayoría no te recuerde...

-Escúchame mago de cuarta... ¡Me tuviste cayendo por una hora! –Sacó sus dos dagas de las mangas de su abrigo -Si es cierto que sabes muy bien quien soy... ¿Entonces por qué provocarme?

-no te tengo miedo... -Dijo con naturalidad el hechicero.

Cómo fue de esperar, Loki se dispuso a atacar primero contra un confiado Dr. Strange quien sólo rodó los ojos y con un movimiento logró aparecer su escudo frustrando el ataque del dios y en un parpado usó una de sus manos para inmovilizar el brazo izquierdo de Loki –Veo que eres lento, mocoso... -Vio como el mencionado se desvanecía ante sus ojos –Maldición... -Volteó rápidamente a sus espaldas encontrándose con el muchacho quien lo sorprendió dándole un patada en el estómago y mandándolo lejos.

-Deberías cuidar tus palabras, anciano... -Dijo ahora un arrogante Loki –Antes de matarte me divertiré un rato contigo... Quiero ver que tan capaz puede ser un viejo mortal contra alguien como yo...

-Bien... -Se levantó y comenzó a sacudirse un poco su ropa –Si es eso lo que quieres... Vamos a arreglar esto a las malas... -Realizó un conjuro para hacer para hacer aparecer una espada hecha con su magia. En cuanto a Loki convirtió sus dos dagas en una espada y se dispuso de nuevo atacar, pero al volver a querer clavar la hoja del arma contra el abdomen del hechicero, este bloqueó rápidamente el ataque y dio comienzo a una danza de espadas a muerte acompañadas con el estruendoso sonido de los metales hasta que en un descuido el mayor logró quitarle al hechicero de ojos verdes su espada y siendo lanzada lejos de ellos -¿Qué se siente perder contra un anciano y encima mortal? –Pero antes de poder decir mas, el peli negro manipuló la capa de strange y lo aprisionó con ella -¡Oye!

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