Bailar... Amar....

Asthon Delware

hola my girls, siento el retraso. Es que me fui de viaje y por unos motivos u otros no me sentía con ganas de escribir. Pero he vuelto y os traigo algo nuevo!!! Ya os dejo con el cap! Disfrutad;)

Oculté mi cara de verguenza y arrepentimiento entre mis manos ante los grandes ojos ámbar de mi mejor amiga, ahora más abiertos que nunca. Tras despertarme completamente sola y con un dolor de cabeza imponente le conté todo lo ocurrido a April en nuestro trayecto de regreso al internado.

-Nash, tienes un iman para los problemas... ¿Y qué sientes?

-Pues odio a James con toda mi alma, es un ser despreciable. Y yo pues soy más idiota aún por utilizar a Max para disipar mi dolor.-dije, soltando un sonoro suspiro.

-¿y.... Max?-dijo con un hilo de voz, apartando la mirada. Fruncí el ceño.

-¿hay algo que no me cuentas verdad?- tras esto ella me miró sobresaltada.

-Yo...eh...

-"Chicos, nos queda poco para llegar. Según órdenes de la directora nada más llegar al centro deben ir a sus cuartos a cambiarse ya que en una hora después comenzarán las clases."-tras el anuncio del odiado profesor todos comenzamos a replicar, bajando del bus.

- Ya hablaremos más tarde April-recordé a mi mejor amiga que asintió sonrojada. Con cansancio recogí mi mochila y maleta mientras la escena de ayer se repetía en mi mente, mientras mis ojos se aguaban. "No Natahasa Evans, no llorarás por el idiota de James. Hoy no". Tan absorta iba en mi mundo que no noté como de un tirón alguien me encerraba con él en el armario del conserje.

-¿PERO QUE MIERD....-dije, antes de que una mano tapase mi boca.

-Shhhh. Tenemos que hablar-esa voz... Quedé en shock. Cuando me encontré con sus ojos verdes mi vista se nubló, invadiendome una extraña oscuridad.

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NARRA JAMES:

No había podido dormir nada en toda la noche. Tras correr en busca de Nash y encontrarla enrollándose con mi hermano, no pegué ojo. ¿Como pude ser taaaaan gili como para joderla así? Mierda y más mierda. Mientras subíamos al autobús reconocí su pelo ondulado cobrizo. Cuando ví su rostro la culpabilidad me embargó; sus ojos siempre brillantes eran más oscuros que nunca. Pero al recordar la imagen de ella con mi hermano, mi furia aumentó. Ella fue la que por despecho se fué con el imbecil de Max, que se joda.

-Jamyyyyy, ¿Estas bien?-dijo la zorra de Amber, la lider de las animadoras del centro. Digamos que es mi "dama de compañia" en casos urgentes, aun que dejé de llamarla por sus celos incontrolados, aun que seguimos con nuestra peculiar amistad. Su pelo rubio natural brillaba enmarcando su fina cara con demasiado maquillaje. Su cuerpo resultante se veía exagerado por su estrecha ropa, aun que estaba buena. Muy buena. Pero no pude evitar compararla con Nash. Su pelo caoba ondulado enmarcando su delicada y blanca tez. Su atlético y esbelto cuerpo con curvas de la perdición. Su naricilla graciiosa, sus ojos felinos y sobretodo sus labios color cereza... Sacudí la cabeza. Me estaba convirtiendo en un mariquita sin saberlo. Me dolían las encías y el cuello de Amber estaba cerca, demasiado. Miré por la ventana respirando ondo. Ante mi sacudida de cabeza, la rubia desistió, agradeciendolo por su parte. Tenía que hablar con Nash, urgentemente. Imágenes besándola descontroladamente, agarrando su cintura contra mi cuerpo, mis colmillos deleitandose de su nectar mientras la hacía mia... Me estaba volviendo loco. Y esque esa chica era mi perdición. Mi obsesion.

Bajamos del bus y, en un momento de despiste, la cojí arrastrándola al armario del conserje.

-¿PERO QUE MIERD...-comenzó a gritar, aunque fuí rapido y le tapé la boca.