Prologo

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Las personas siempre están en busca de algo, los medios día a día te hacen sentir que no estas completo y que nunca lo estarás si no es que te llenas de objetos materiales, mantienes tu cuerpo en perfecto estado o mejor dicho te apegas a los estándares que la sociedad impone además de consumir toda la basura que se anuncia, pero hay algo que las personas buscan sin cesar y no necesariamente es por sentirse vacíos.

Desde hace cientos de años aparece cierta marca en algunos "elegidos", ya sea en algun brazo o pierna, espalda, pecho, hombros estómago, esta marca hará acto de presencia como si de un tatuaje se tratase y no podrá ser borrada hasta que aquel "acto" sea consumado, además gracias a esta podrás sentir algunas de las emociones de esa persona especial.

El encontrar a tu alma gemela, esa persona que te dará amor y calidez, que nunca te hará sentir solo y te hará dichoso por toda la vida es el algo que muchos buscan persistentemente pero por desgracia solo unos pocos lo encuentran, según los ancianos si a la edad de 16 años esa marca no aparece quiere decir que nunca podrás encontrarte con tu alma gemela y tendrás que conformarte con lo que la vida pueda presentarte y eso Luffy lo sabía perfectamente cuando al cumplir los 17 esa marca nunca apareció en él, aunque no era algo que le quitara el sueño, el moreno era más bien un chico despreocupado en cuanto a temas del amor se hablaba no como su amigo Sanji que al darse cuenta que nunca tendría aquella marca ni siquiera su padre Zeff y su hermana Reiju pudieron consolarlo por los casi dos meses enteros en los que se la paso encerrado en su habitación mientras en sollozos repetía un "Nami-swan" muy lastimero, aunque el ser uno de esas personas "elegidas" le parecía hasta cierto punto interesante, sonaba extraño pero a veces sentía un poquito de celos al ver a su hermano mayor Ace con aquella marca en su brazo izquierdo, el nombre de quien es su compañero de por vida, Sabo, aunque desgraciadamente su hermano aun no lo encontraba físicamente el hecho de saber su nombre y en ocasiones sentir sus emociones le eran suficientes por el momento, Luffy trataba de no pensar en ello pero teniendo en cuenta que todos en la escuela solo presumían su marca y otros se lamentaban por la falta de ella no era como si tuviera muchos otros temas de conversación y pensándolo bien el niciquiera había tenido alguna pareja hasta ahora, recordaba a un par de chicas que se le declararon pero nunca acepto salir con ellas... así que no, él no tenía ninguna anécdota que contar en cuanto a tener pareja se habla y aunque tuviera que sentir esa pequeñísima opresión en el pecho al ver a Ace tan feliz con su marca, eso no le importaría, esa estúpida marca puede irse al diablo....o no.

A unos cientos de kilómetros lejos de Luffy, un chico de cabello corto y de un extraño tono verde  cargado con una mochila en su espalda, un ridículo bolso rosa con listones negros en su brazo derecho y dos grandes cajas en sus hombros veía por ultima vez una ahora solitaria casa...


Zoro odiaba tener que mudarse tan seguido, el tener que conocer caras nuevas cada cierto tiempo era muy problemático y más para un chico tan introvertido como lo era el, entendía que sus padres debían mantenerse en movimientos por sus trabajos pero aun así le molestaba, a diferencia de su hermana menor, Perona, que amaba conocer tanto personas como lugares nuevos además siempre hacia cientos de amigos a donde iba aunque de igual forma al final se despedían llorando y prometiéndose mil cosas que nunca pasaron ni pasaran... de la misma forma era uno de sus padres, Shanks, un llorón al despedirse de los vecinos y amigos, Zoro camino hacia el auto que los llevaría a su nuevo hogar, metiendo antes las cosas que llevaba en la cajuela, toma asiento a lado de su pequeña hermana quien en un par de días cumpliría sus 17 años

-Mi marca aun no aparece...- la pelirosa veía sus brazos aun con rastro de lagrimas en ojos y mejillas por despedirse de sus amigos- ¿crees que aparezca hermano?- no quería admitirlo.. pero aunque Perona lo molestaba día y noche, no podía cuando ella sonaba y lucia así de triste

-A mi nunca me apareció, pero tal vez tu tengas suerte, recuerda que nuestros padres la tuvieron en su momento, ademas tu tienes esa rara suerte como papá... siempre consiguen lo que quieren- decía mientras se ponía el cinturón de seguridad y hacia lo mismo con la pelirosa- ademas, no creo que sean tan real eso de que solo aparezca hasta cierta edad.

-¿Porque lo dices?

- Creo que es mas de que llegue el momento adecuado... o algo asi- Zoro realmente pensaba eso, no era como si el estuviera muy al pendiente de la vida amorosa, pero cierta parte de el creía en ello, con sus ya 19 años esa estúpida marca no había aparecido, desde niño su papá le había hablado sobre la importancia del nombre de su persona destinada, su alma gemela... el peliverde siempre le ponía mala cara al mencionar el tema, "eso es de niñas tontas" decía, y aun hoy sigue pensando en ello... o algo así aunque en este punto prefería seguir sin esa marca y mas con la vida que llevaba.

Perona solo lo miro algo confusa, pero al final solo sonrió- Tal vez tengas razón, entonces esperare- miro por la ventana del auto y sonrió- Padre ya viene

Aquel hombre de cabellos cortos y negros venia en dirección al auto con algunos documentos en mano y contestando una llamada a su celular, el pelirrojo ya estaba acomodándose en el asiento del copiloto

-¿Paso algo?- Shanks pegunto al momento en que Mihawk tomo asiento en el auto-

-Nada de que preocuparse, ¿ya esta todo listo? -volteo a ver a sus hijos- ¿seguros de que no olvidan nada?, lo que quedo sera mandado a la basura -ambos asintieron con la cabeza, Shanks solo sonrió y grito un "en marcha" para después ver como algunos autos negros se preparaban para escoltarlos a su destino...

Que difícil era vivir con padres enlazados con la Yakuza... eso pensó Zoro mientras se quedaba dormido.


La actualización sera semanal :d... o eso espero....

Tu nombre, mi destinoWhere stories live. Discover now