Medicine. [McLennon]

XV

El castaño abrió una toalla y de inmediato cubrió el cuerpo de su princesa con esta pasándola por sus hombros, repitió el mismo procedimiento pero esta vez dejándola reposar sobre las hebras color azabache de Paul. Envolvió una en su cintura y pronto ya sus brazos se encontraban envolviendo con cuidado el torso del menor para progresivamente llevarlo hacia la habitación.

Al llegar a la habitación lo dejó sentado en una orilla de la cama para después buscar algo cómodo para vestirlo, sabía que su cuerpo dolía demasiado y quería hacer que su princesa se esforzara lo menos posible. Se encargó de secar su cuerpo con cuidado de no tocar mucho las partes sensibles.

Se encontraba ya vestido cuándo John estaba secando su cabello con la misma toalla que había puesto sobre su cabeza hacía unos minutos atrás. El menor de ambos vestía una camisa de botones muy grande para su cuerpo, que tapaba hasta la mitad de su muslo y ropa interior negra, mientras que John solamente vestía su ropa interior. Lennon sacudía sus manos de un lado a otro sobre la toalla para intentar absorber toda el agua que fuera posible del cabello del menor.

De pronto un pequeño ruido llegó a los oídos de John, seguido de que Paul pusiera de inmediato sus manos sobre su estómago.

"Iré a preparar algo para comer, pero antes llamaré a tus padres, han de estar muy preocupados, ¿No crees?" Paul le dirigió una mirada algo asustado. "Hace más de cinco horas que estás en Londres, niño lindo." El pelinegro soltó un pequeño suspiro y asintió un poco. "No pongas esa carita." John dejó un pequeño besito sobres coronilla del menor y pronto se levantó de la cama.

No pasó mucho tiempo cuándo Paul siguió los pasos de John hasta la sala del departamento, cuándo estaba en el pasillo de escondió en la pared de este viendo casi escondido como John hablaba por teléfono.

"Llegó aquí hace unas horas." Lennon se volteó y al ver a Paul escondido detrás de la pared le dedicó una pequeña sonrisa. "Yo venía llegando de la universidad cuándo lo encontré en la recepción del edificio." Se recargó en la pared, sin dejar de observar a Paul. Este seguía escondido detrás de la pared como si tuviera miedo de que su madre saliera del teléfono sólo para regañarlo. "Está bien, o algo así." El pelinegro se acercó un poco más a dónde estaba John para así poder escuchar la conversación por parte de su madre también.

"¿Cómo que 'algo así'?" Pudo escuchar el chico de ojos color hazel.

"Cuándo lo ví en recepción estaba muy mal, señora McCartney." Lennon estiró una de sus manos hacia Paul para después sumergirla en el cabello del anteriormente nombrado, comenzando a repartir suaves caricias sobre este. "No sé si el director le haya comentado. Pero a Paul lo golpearon en la escuela antes de que escapara a Londres." El menor al escuchar eso se abrazó al pecho de John, este no puso resistencia al abrazo, solamente se dedicó a seguir repartiendo caricias por el cabello azabache y hablar por teléfono.

"El director no me comentó nada de aquello." Respondió la mujer, con el corazón en la boca al saber lo que había pasado su único hijo. "¿Cómo está? ¿Se encuentra bien?"

John al escuchar eso le dedicó una mirada a su pequeño, este asintió ligeramente entendiendo a lo que se refería. Lennon le dió el teléfono a Paul para que este mismo le contara.

"¿Hola?" Musitó casi de inmediato el menor cuándo tuvo el teléfono apegado a su cabeza. "Sí... Ya me siento mejor, no debe preocuparse." John esbozó una ligera sonrisa al oír eso. "Sólo me duele todo el cuerpo, todo está lleno de moretones." Lennon se separó ligeramente de Paul y comenzó a caminar hacia la cocina para preparar algo.

"¿Quieres que vaya por ti, cariño?" Alcanzó a escuchar Lennon, Paul de inmediato le dedicó una mirada.

"A decir verdad... Me preguntaba si usted me daría permiso para viajar con John a Liverpool mañana por la tarde."