Capítulo XXII

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_______ no había logrado dormir desde que finalizó su conversación con Luke, tampoco había dejado de llorar. Eso había sido, por mucho, lo peor que sentía que le había pasado, sentía como si faltara una parte de ella, un hueco en el corazón que le dificultaba respirar con tranquilidad, pero había sido su decisión y le gustaba que Luke la respetara, aunque también le habría gustado que trate de convencerla de lo contrario, quizá hubiera aceptado; pero ya no tenía sentido seguir dándole vueltas al asunto, se había terminado y debía asimilarlo... ¿A quién quería engañar? Jamás iba a poder asimilarlo. Aunque Luke haya dicho que regresaría por ella, ella no estaba tan segura, para su regreso, los chicos serían más conocidos y muchas chicas hermosas estarían detrás de ellos. Lo único que la animaba a estar bien era la llamada de Luke en la noche, él debía escucharla bien para que no se sienta mal y pueda tener un buen desempeño en el escenario.

Los días pasaron y su ruptura con Luke se había hecho a conocer en toda la escuela, fue el punto de murmullos y chismes durante los primeros dos días, pero, felizmente, ya se estaban olvidando del tema. Agradecía poder contar siempre con Katherine que la mantenía animada y la distraía un poco de todo lo que estaba pasando. Ella seguía con Calum, ellos sabían cómo manejar el tema de la distancia y estaba contenta por su amiga, aunque no podía evitar sentir un poco de envidia por que ella no se sentía capaz de lo mismo.

Llegó a casa exhausta de un largo día en la escuela y en su sala estaba nada más y nada menos que Fabricio, ellos no habían terminado de la mejor manera, pero cuando ella entró, él le dedicó una cálida sonrisa. Le desconcertó un poco verlo ahí hasta que recordó que era amigo de su hermano y todo encajó. Lo saludó tímidamente y se apresuró a ir a su cuarto, no tenía planeado quedarse a conversar.

-Lamento que lo tuyo con Luke no haya funcionado.- dijo Fabricio, pareciendo apenado, antes de que _______ logré irse.

-Los chismes vuelan, ¿cierto? - respondió ella con cierta ironía y se apresuró a seguir su camino.

Tuvo que soportar una incómoda cena con Fabricio y su familia, y luego regresó a su cuarto, terminó sus quehaceres y se dio una larga ducha, luego se echó en su cama a leer su libro favorito mientras esperaba la inminente llamada de Luke. A las diez en punto de la noche, su celular comenzó a sonar. Una sonrisa se le dibujó en el rostro. Era él.

Hablaron durante horas, al igual que todas las noches, le gustaba escuchar a Luke y todas las cosas que tenía que contarle acerca de la gira, lo estaba pasando bien. Ella se limitaba a escuchar, a hacer pequeños comentarios y a evitar ahondar en lo que era su día ya que era muy aburrido y monótono sin Luke. La conversación terminó cuando ella cayó en la cuenta de que ya era muy tarde y no lograría levantarse temprano para ir a la escuela; así que se despidieron durante otro largo rato.

Su alarma sonó y la apagó inmediatamente, quería dormir cinco minutos más; cerró los ojos y cuando los volvió a abrir se percató que no había dormido cinco minutos más, sino media hora más. Rezó por que su hermano aún no se haya ido, si no tendría que tomar el autobús. Se cambió y arregló fugazmente, pero cuando bajó para darle el alcance a su hermano, este ya se había ido. Para su suerte, su padre aún no salía a trabajar y se ofreció a llevarla.

Llegó el fin de otro largo día y _______ y Katherine esperaban el autobús que las llevaba a casa; lo que ellas no esperaban, era ver al carro de Fabricio aparcarse frente a ellas. Bajó la luna del carro para confirmar que sí era él.

-Hey, ______ - dijo con una radiante sonrisa-, estoy de camino a tu casa, si deseas te puedo dar el aventón.

¿Qué?, pensó atónita.

Heartbreaker girl (Luke Hemmings y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora