Extra point (Epílogo)

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|Punto extra
(Epílogo)

Despedirse de alguien no es una experiencia grata, especialmente cuando lo haces para siempre.

La muerte nos ha de llegar a todos, de distintas formas y cuando menos lo esperemos. Los que amamos sufren nuestra partida, inclusive los que nos odian sienten pena, puede que sea hipocresía pero en sí una muerte toca los corazones más fríos.

Y nada importa una vez que das tu último soplo.

Recuerdas cada momento de tu vida en el que deseaste morir porque justo estando en esa brecha, a un paso de irte para siempre, ya no quieres hacerlo. Deseas vivir y no puedes.

Sin embargo, la muerte de Lia trajo paz y tranquilidad en el pueblo. Los habitantes creyeron que esta era la causante de los problemas ya que resultó ser quien se encontraba en el momento y lugar equivocado, otorgándole la identidad de capucha roja.

Los que se encontraban cerca aquella noche supieron que era lo contrario, que Lia murió sin ser ella quien debía hacerlo pues no, no era la villana de esta historia.

¡Alcaldesa, no puede hacer eso! Le dijimos que ella no fue. Se entrometió justo cuando le iban a dar a la verdadera capucha roja —Verónica gritaba, defendiendo a la que alguna vez fue su amiga y que ahora ya estaba muerta. Sentía la responsabilidad de defenderla en honor a su memoria.

—No tiene pruebas, señorita Lodge, ni usted ni sus amigos —Inquirió señalando al resto.

—En eso se equivoca —Contradijo Betty, la cual colocó un sobre amarillo sobre su escritorio.

—Ahí encontrará la verdad —Explicó Archie, sin decir nada más.

La única persona que faltaba optó por no separarse nunca de la tumba de la que solía ser su amada. De nueva cuenta derramó más lágrimas, unas siendo más amargas que otras.

—Oye Jones, ya pasó una semana y no te has despegado de aquí, comienzas a preocuparnos —La morena se situó a su lado, sentándose sobre la tumba de Lía, suspirando profundamente.

—No puedo Toni. Yo la amaba y ahora ella... Ella... —Se quebró, ahogando sus quejidos y llorando con ganas— está muerta, jamás volveré a verla, no pude ser mejor persona con ella ni mucho menos tratarla como se merecía, me arrepiento tanto de no haber hecho las cosas correctamente y cuando por fin volvió creí que al menos construiríamos una gran historia, juntos

Aquellas palabras conmovieron tanto a su compañera a tal punto de girar el rostro para no ser vista llorando. Era obvio que la extrañaba, a ella, quien se mostró muy amable al conocerse y con la que vivió aventuras asombrosas. Presenció sus dolores, peleas y momentos divertidos. Inclusive la vio agonizar.

La alcaldesa encendió su laptop, ingresando en esta el USB contenido en el sobre amarillo. A un costado del aparato electrónico yacía una hoja de papel, llena de palabras escritas por la mismísima Lia.

Dio incapie a revisar lo que traía el USB, siendo un video de no más de cinco minutos.

Aquello le recordó el incidente de Jason Blossom, teniendo un dejavú de la noche en que obtuvo mismas pruebas para atrapar al asesino del gemelo.

Con un click comenzó, mostrando a una dama cubierta con una capucha y a la joven fallecida, ambas manteniendo una plática cuando de pronto Lia empujó a capucha roja y las balas impactaron en su cuerpo.

«Yo soy culpable. Permití que llegara lejos aún cuando tuve la oportunidad de frenarla. Juró justicia por mí, por mi padre, por nosotros...»

Apology ↬ RiverdaleWhere stories live. Discover now