- Si señor, pero el problema es el dinero, sospecharan de semejante cantidad.

- Viktor  ¿Te importaría sacar a la chica de aquí? ¿O quieres que escuche todos mis negocios? Subela a una habitación.

- De verdad no quiero incomodar, yo puedo irme a mi apartamento - Trato de sonar calmada,aunque por dentro estoy muriendome de los nervios.

- No creo que sea recomendable salir tan tarde y más con lo sucedido en el bar. Viktor te mostrará una habitación.

- Por acá señorita - me orden  el hombre,el cual es de cabellos rojizos , ojos verdes y mayor que Dimitri.

- Cuando dejes a la señorita Hilton en su habitación te espero en la oficina Viktor.

- Entendido señor.

El hombre me conduce por las escaleras, mientras Dimitri desaparece por un pasillo.

- Esta sera su habitación, esta al lado de la del señor Ivanov. Así puede estar más segura.

¿Más segura?

- Gracias.

Miro mi atuendo y me doy cuenta que sigo con el maldito vestido pegado color lavanda, pero me da vergüenza pedir ropa, no soy nadie para hacerlo.

- Si necesita algo aviseme o llama a una de las empleadas.

- Lo haré - le doy una sonrisa y cierro la puerta de la habitación, esta es totalmente enorme, creo que es más grande que mi apartamento. Y el balcón tiene una hermosa vista de Seattle.

Me recuesto en la cama,tengo hambre. Y me siento sólo como una tonta, nunca debi aceptar que ese hombre me trajera.

¿Que tal si sólo finjio ser amable para mantenerme encerrada? ¿Y si no me deja salir más? Creo que enloquecere con tantas suposiciones.

Mi estómago gruñe y lo que hago es salir de la habitación bajando con mucho cuidado de que no se escuchen mis pasos. Voy directo a la cocina y encuentro a una mujer peli negra preparando la cena. Ella se asusta en cuanto me ve parada en el marco de la entrada.

- Dios mío me asusto.

- Lo siento no era mi intención.

- Debes ser la chica que trajo el señor Ivanov, Viktor me comento de ti. Soy Tiffany. Pero me dicen Tiffy.

- Rossalie, puedes llamarme Ross si quieres.

- ¿Estas aca porque tienes hambre verdad?

- Bueno..

- Tranquila, te preparare algo, al señor Ivanov le gusta mucho las carnes rojas, pero si quieres otro plato puedo prepararlo por ti.

- Claro que no. Ya es mucho lo que el señor Ivanov ha hecho por mi.

- Bueno,iré a llevarle su cena y enseguida vuelvo.

Asiento con la cabeza y me quedo en la pequeña isla que hay en la cocina, todo es de mármol, una cocina totalmente lujosa.
Tiffany aparece poco después y me sirve un plato con el mismo contenido del que tenia hace unos instantes en sus manos.

- ¿Tienes ropa para cambiarte?

- Si - miento, es seguro que si le digo lo contrario le dirá a Dimitri y no quiero molestarlo. Sólo esperaré la mañana y me iré.

- Creo que hay unas pijamas en el cuarto de lavado te daré unas. El señor las compro para su prometida.

- ¿Dimitri está comprometido? - dejo a un lado el tenedor con un pedazo de carne en el.

Esencia RusaWhere stories live. Discover now