Sólo mío [ChrisErick]

Cap 30: Sólo mío.

Estaba a unos minutos de aterrizar en Nueva York, estaba muy nervioso, no quería que nada fuera a interrumpir lo que tenía planeado. No era nada tan grande, sólo que si había muchas fans o no lograba ver a Erick como yo tenía planeado, esto no iba a funcionar.
O si se veía muy lindo no iba a poder moverme de mi lugar.

Acomode mis auriculares escuchando la última canción antes de aterrizar. Saved de Khalid.

Después de unos minutos ya había pasado por la revisión. Renato me había dicho que el estaría en la cafeteria del aeropuerto. Camine hasta allá, no me había encontrado con ninguna fan lo cual era extraño. Continúe caminando hasta que vi a Renato sentado unas mesas al fondo, sentado junto con mi Enano que al parecer también acababa de llegar.
El cual podía ver en su mirada que estaba nervioso.

Cuando estaba unos metros cerca, Erick me miro y sin dudarlo corrió hacia mi, solté mi maleta y extendí mis brazos envolviendolo en ellos.
Cerré los ojos aspirando su aroma y enredando mis dedos en su suave cabello.

-Justo de esto tengo que hablar con ustedes... - dijo Renato poniéndose de pie sin moverse de la mesa.

Erick me soltó bajando la mirada mientras mordia su labio. Intento irse pero tome su mano jalandolo para ponerlo frente a mi.

-Permíteme Renato. -dije elevando una mano en el aire- ... debo darle algo a mi novio antes de que se enoje...

-¿Tu q-que? - dijo Renato quitándose los lentes.

Sonreí y tome la cintura de Erick con un brazo pegando su cuerpo a mi, con mi mano libre tome su mejilla haciendo que sus ojos me miraran. Me aserque a el juntando sus labios con los mios en un beso tierno. Moví mis labios lento y pude sentir como todo se congelaba en un momento donde sólo el y yo existiamos. Sentí las manos de Erick en mis brazos y deje de besarlo. Sentia mi corazón querer salirse de su lugar.

Cuando gire a ver a Renato, estaba sentado otra vez en la silla con los ojos cubiertos por su mano y la otra la tenía en el corazón. Parecía y le daría un infarto.

Sentí las manos de Erick pasarse tras mi espalda y baje mis labios hasta su oido.

-Todo va a estar bien... - dije.

. . .

Después de eso Renato sólo nos pidió que lo siguieramos, podía notar varias miradas sobre nosotros. Caminamos en silencio hasta el carro de Renato el cual no hablo en todo el camino, ni siquiera nos miraba por el espejo retrovisor.
De vez en cuando yo volteaba a ver a Erick el cual sólo mordia uno de sus dedos. Quite la mano de su boca y la apreté entre mis dedos.

Llegamos a un lugar que al parecer eran las instalaciones de Sony pero en New York. Renato nos pidió que bajaramos y lo siguieramos. Caminamos tras el y en ningún momento deje que Erick me soltara.
Estábamos juntos en esto y yo no iba a dejarlo por nada.

Renato abrió una puerta pidiendonos al Enano y a mi que entrábamos primero.
En aquel cuarto no había nadie, sólo una gran mesa redonda con muchas sillas a su alrededor. Renato nos dejó ahí solos diciendo que tenía que ir por unas personas. Voltee a ver a mi chico que estaba mirando la sillas mientras se frotaba las manos. Giro a verme con una mirada nerviosa en sus ojos.

-Ven acá. - dije abriendo los brazos.

Él caminó hacia mi y rodeó mi espalda con sus brazos escondiendo su rostro en mi cuello. Apreté su cintura y con mi otra mano acariciaba su cabello.

-¿Qué crees que pase?

- No tengo idea, sólo espero y sea algo bueno... - dije.

-Por como esta Renato, no creo que sea bueno.