Sólo mío [ChrisErick]

Cap 11: Sólo por que es tu novio.

-¿Qué pasa, Chris?

- El tonto de Richard...

-Sigo escuchándote, ¿sabes? -escuche que me decía desde el teléfono.-Oye, pero aún así ya levántense, ya guarde los globos del pasillo.

- Ya vamos, ya vamos.

Corte la llamada. Y antes de oír a Erick replicar tome su mentón para dirigirlo a mis labios.

-Buenos días, novio. - dije sonriendo sobre sus labios.

-Buenos días.-intento sentarse en su lugar pero una mueca de dolor lo hizo volver a recostarse.

-¿Qué pasa?

-Nada. - se tapó con las cobijas hasta la cara.

-¿Seguro?

-Tengo que bañarme.

- Esta bien, mientras yo recojo.

Me levanté para ponerme algo de ropa. Y comencé a recoger lo que había tirado ayer en la noche.
Pero Erick seguía acostado.

- ¿No tienes que bañarte? Se hará tarde.

- No puedo levantarme. Me duele el cuerpo.

- ¿Eso es por lo de en la noche?

- Si, idiota.

Sin hacer rudo me acerqué para quitar las cobijas de su cara.

-Puedo llevarte al baño cargado. - me agache y lo bese pero sus manos me quitaron.

- No me he lavado los dientes.

- No me importa. -sonreí y quite las cobijas de su cuerpo.

Pase uno de sus brazos por mi cuello y tome sus piernas con mi brazo. Llevándolo hasta el baño poniendo de piel en la ducha.

-Esto es demasiado vergonzosos. -dijo recargando su frente en mi aun desnudo pecho.

-¿El que te cargue sin ropa?

-En parte... pero... algo está escurriendo acá atrás.

-¿Era eso?- dije poniendo mis manos en su trasero.- ¿Por que vergüenza? Si es mio...

-Ah, ¡¡cállate!!

Me empujó cerrando la puerta de la ducha. Sólo escuche que abrió la llave del agua, salí a cambiarme de ropa y a guardar mis cosas en la maleta.

-¡Chris!

Camine al baño abriendo la puerta encontrando un Erick con el cabello húmedo, gotas de agua por todo el cuerpo y una toalla en la cintura, pero aún estaba en el lugar donde lo había dejado.

-¿Qué paso? ¿Quieres algo de ropa?

-No... - Se voltio viendo la pared evitando que viera su sonrojo.

-¿Necesitas algo?

-Puedes... carg... - lo último lo dijo tan bajo que no entendí.

-¿Como?-entre al baño hasta pararme frente a él.

-Podrías... cargarme... - Sus manos cubrieron su rostro. - ...Me duele la espalda.

Solté una leve risa por la vergüenza que Erick estaba sintiendo. Lo cargue como antes había hecho hasta dejarlo sentado en la cama.

-Odio esto. No puedo ni caminar sin que duela.

-Por mi no hay problema, lo haría por mi novio, puedo cargarte todo el día si es necesario. No pesas nada.