Ya no te tengo.

29 2 0
                                    

Ante todo, no escribo para que me lean, eso me importa poco. Escribo para desahogarme, un consejo que me dió una persona que aprecio mucho. Un consejo por el que estoy agradecida, aunque no ayude mucho, algo hace.

Ahora que ya no eres mío, no hago más que imaginarte, en todo momento. Tu recuerdo me persigue, ya sea en la realidad o en un simple sueño. No puedo evitarlo, y me paso las noches en vela pensando en ti. Y es que hasta en los momentos más intimos, o cuando creo que todo va bien, apareces en mi mente, como un balazo que atraviesa mi sien de forma descontrolada. Ahora todos los recuerdos y los sueños hermosos se han convertido en pesadillas desgarradoras. Que me apuñalan cada noche, y atraviesan todo mi ser dejando algo más que un simple escalofrío.

Y si, son pesadillas, a mi edad, pero es que me generan auténtico pavor, un miedo tan real, tan puro. Ese miedo a perderte por completo, miedo a que no vuelva esa confianza, miedo a que aunque vuelva, no sirva para nada.

Miedo, es algo tan simple, tan humano, y ya no se como desacerme de el, pues ha arraigado en lo más profundo de mi ser, de mi corazón. Y a pesar de tener razones para luchar contra el, he incluso de tener la fuerza para superarlo, sigo teniendo miedo.

"Ahora que ya no eres mío y no te tengo, no puedo controlar el miedo a verte diciéndole a cualquiera que si."

Esto es un verso de una canción, pero representa a la perfección el mayor de todos mis miedos. Además, sobre el que no tengo ningún control, por mucho que digas que "está en mis manos".

Y este último miedo aumenta ahora que te alejas, y pones kilometros de separación entre ambos. Una distancia que antes no significaba nada para mí, ahora me parece un mundo. Y sé que por el simple hecho de escribir no conseguiré nada, lo sé, pero aún así a mi me ayuda.

Relatos y pensamientos. Où les histoires vivent. Découvrez maintenant