Mensajes De Una Desconocida (JungHyo)

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El tiempo pasó muy rápido, ya habían pasado 6 meses desde que iniciamos el año escolar. Me volví amiga cercana de Jungkook, Jimin y Jin. Las chicas decidieron participar en unas audiciones para ser trainee a las cuales me negué, puede que ese sea mi sueño pero por ahora quiero enfocarme en mis estudios y acabar el año con un promedio impecable.

Me puse a pensar en la locura que cometí cuando le hablé a Jungkook por Whatsapp, todavía lo seguimos haciendo...y todavía no sabe que soy yo. Mi madre me compró otro celular 2 meses después de entrar al colegio como recompensa a mis buenas calificaciones y por ayudarla en las vacaciones. Por lo tanto, mi viejo celular lo utilizaba para hablar con Jungkook como "Chica misteriosa" y en mi nuevo celular como "Ji🙈", me apodó así hace tiempo. Él me contó sobre la "Chica misteriosa", me dijo que de seguro era una broma y que no le iba a volver a hablar; y efectivamente, no me ha vuelto a hablar por mi antiguo celular.

Hoy estamos en mí casa, haciendo una tarea para Sociales. Bajé por algo de comer para los 2; él se quedó arriba.

Subí con la merienda. Entré al cuarto y me encontré con JungKook sentado en mi cama, al lado de mi mesita de noche con el cajón abierto y él con mi antigüo celular en la mano.

Yo entré en pánico.

JungKook me miró a la cara. Tenía un semblante serio, en sus ojos pude distinguir enojo.

-¿Qué significa ésto? -dijo fríamente sin quitar su mirada en mí.

Rápidamente dejé la comida en la mesa donde teníamos la tarea y me dirigí hacia él temblorosa.

- N-nada. -arrebaté el celular de sus manos y lo guardé en el cajón donde se encontraba antes.

-¿Cómo que nada? -gritó. Explotó sacando su furia- Eres una mentirosa, hipócrita. -escupió amargamente.

Me asusté por su forma de reaccionar y las lágrimas no tardaron en caer seguidamente por mi rostro.

- Puedo explicarlo. -fue lo único que pude decir debido a mi llanto.

Vi recoger sus cosas y meterlas en su mochila a la maldita sea, salió de la habitación y segundos después escuché la puerta principal ser azotada.

Caí en mis rodillas y rompí en llanto.

Nunca pensé que ésto fue a pasar.

Fue mala idea esconderme de esa forma.

Ahora él me odia.

Nuestra amistad se fue a la basura.

Y todo por mi estúpida cobardía.