Mi jefe (Ian Somerhalder)

7

(Hot)
Continúa besándome, introduciendo la lengua.
Adoro la sensación de que nuestras lenguas se choquen.

Me tiene completamente inmovilizada.
Comienza a besarme el cuello y muevo la cabeza excitada.

Me coge de la camiseta y me mira, cómo pidiéndome permiso para quitármela.
Asiento y me la quita con cuidado.

Estoy nerviosa, no puedo evitarlo.
Sigue bajando con sus besos dede mi cuello hasta mi ombligo.
Fija su mirada en mis pechos y me quita el sujetador.

Me los besa y me aprieta los pezones contra sus labios y suelto un gemido.
Me río y él me mira sonriente.

Me siento en la cama y le quito la camiseta.

Admiro sus pectorales, tan bien marcados...
Deseo mucho a este hombre, muchísimo.

Le beso y me sigue.

Se quita los pantalones de repente y yo sólo puedo fijarme en el enorme bulto que resalta en sus calzoncillos.

Me río y me mira extrañado.

—¿Que pasa?
—Nada, nada.

No sé si me he reído por mis nervios, o por su erección.
O quizá porque no sé muy bien que debo hacer.

Soy algo inexperta en esto y, por lo que sé él debe ser todo un profesional.

Se acerca y me susurra al oído.

—¿Estás segura de esto?
—Por supuesto, no pares. -Susurro.

Sonríe y me desliza los vaqueros hasta dejarme en ropa interior.

Se agacha y me besa las piernas, subiendo hasta mi sexo.
Antes de llegar para y me acaricia los muslos, me da un escalofrío.

Veo su sonrisa asomándose bajo sus mofletes.
No puedo dejar de pensar en que va ha hacerme, y cómo.

Lo único que sé es que confío en él.

Le hago un gesto con los brazos y sube de nuevo a la altura de mi cabeza para besarme.
Sus labios saben muy bien.
Demasiado bien.

No quiero despegarme de ellos.

Me besa de nuevo el cuello, creo que le gusta hacerlo.
Suelto un respiro.

La tensión aumenta y quiero sentirlo dentro de mi...

—Eres perfecta. -Susurra.

Me pongo roja y no sé que contestar.

—Puedo oler desde aquí lo mojada que estás. -Dice con voz ronca, excitado.