High Hopes [Clexa]

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-Muy bien, voy a necesitar que te sientas un poco para poder escuchar tus pulmones, te va a doler por tus costillas pero será un par de respiraciones y te vuelves a acostar. –Le dijo y la castaña asintió sin dejarla de ver-

Lexa lentamente se fue sentando pero comenzó a quejarse del dolor, Raven se colocó de pie y la agarró del brazo enyesado para ayudarla y aquella rubia la apoyaba de la espalda y también la tomó del brazo. Cuando quedó sentada la ojiverde, rápidamente la de ojos azules comenzó a escuchar sus pulmones y a pedirle que respirara de cierta forma, cuando terminó le ayudaron a acostarse lentamente.

-Duele horrores. –Se quejó la castaña-

-¿Qué esperabas? ¿Un orgasmo? –Raven preguntó y se llevó una mirada amenazante de su mejor amiga y vio como aquella rubia trataba de no reírse-

-Falta tu temperatura y terminé. –Sacó de la bolsa de su bata un termómetro y se lo colocó en el oído, cuando se escucharon unos pitidos lo alejó y consultó la temperatura- Eso sería todo, con permiso. –Se despidió y salió de ahí mientras apuntaba algo en unas hojas-

-Ni un día llevas consciente y ya te estas comiendo con la mirada a la doctora. –Raven llamó su atención y la castaña volteó a verla sorprendida- No me veas así que sabes que es la verdad.

-Claro que no. –Se defendió y rodó los ojos-

-Aja. –La morena sonrió de lado y se escuchó la puerta de la habitación abrir de nuevo-

-Lex. –David entró junto con sus papás- Me da gusto verte despierta. –Se acercó aliviado a su hermana y le dio un beso en la frente para después tomar asiento en la orilla de la camilla-

-Y a mí me da gusto verlos a todos, aquí, conmigo. –Todos le regalaron una sonrisa y el alivio se les podía notar-

-Te traje algo. –Raven sacó de su bolsa trasera de su pantalón un celular envuelto en unos audífonos y se lo entregó-

-¿Y el mío? –Preguntó cuándo no reconoció el celular-

-Se rompió. –Robert contestó-

-Así que decidí comprarte uno nuevo. –El castaño contestó y le pasó una mano por su pierna-

-Gracia, a todos. –Contestó la ojiverde y guardó el celular debajo de la sabana-

Los cuatro estuvieron acompañando a la ojiverde un par de horas más hasta que se tuvieron que retirar ya que el tiempo de visitas había terminado, después de verlos retirarse, se quedó dormida y cuando volvió a despertarse se dio cuenta de cómo se sentía la habitación fría y sola. Agarró su celular y se dio cuenta que era de madrugada, se colocó sus audífonos y se perdió en la música, se quedó viendo un punto fijo mientras pensaba sobre el accidente y cuando trató de recordar ese momento le llegó de nuevo la misma frase que le dijo a Abby, soltó un suspiro pesado y siguió escuchando su música y sonrió al darse cuenta que Raven había puesto también de sus canciones, se quiso colocar un poco de lado pero el peso de su pie izquierdo y su brazo se lo impidieron, trató de acomodarse pero hizo una mueca al no lograr un buen resultado. Estaba tan sumergida en su música y pensamientos que cuando vio aquella rubia de ojos azules colocarse al pie de su cama se llevó una mano al pecho por el susto, se retiró los audífonos y pausó su música para prestarle atención.

-Lo siento. –Se disculpó la rubia-

-No te preocupes, no escuché cuando entraste. –Metió su celular de nuevo bajo sus sábanas-

-Vengo a darte un rápido chequeo. –Le informó y la castaña asintió-

La rubia le hizo a lado las sábanas y le pidió que moviera los dedos de su pie, al hacerlo sintió como comenzaba a picarle la férula e hizo una mueca, le pidió que subiera un poco el pie y al hacerlo la rubia le ayudó a bajar poco a poco la pierna, se acercó para revisar su costado, le palpó un poco y la volvió a tapar.