De bromas pesadas [Jimsu]

De venganzas y hermanos menores.

Alguien tocaba su mejilla de manera insistente, cosa que le molestaba, él realmente quería dormir. Sin embargo, se vio obligado en cuanto sintió la cálida  respiración de alguien, mezclado con olor a tabaco, y JiMin no fumaba -Ya no-.

Abrió sus ojos lentamente esperando ver un ardiente JiMin frente a él.

En cambio a eso, era un pelinegro. Innegablemente atractivo,  pero que pocas veces había visto, tal vez en la escuela.

También prestó atención a su alrededor, definitivamente no parecía la habitación de JiMin, más bien, era la de un adolescente en su etapa emo.

—Hola TaeHyung— saludo simple aquel chico que dejó de tomarle atención en cuando despertó.

—¿Hola?—Cuando intentó movilizarse, estaba totalmente atado con un cuerda.

—Ahora que trabajas para mi debes usar un uniforme ya sabes—, se levantó el chico y abrió el gran closet que estaba por ahí. Sacó un traje de maid color rosa y negro, Tae estaba confundido.

—¿Y JiMin?

—¿Park? Él  solo vino, recogió el dinero y te dejo, ya sabes, esa cosa... trueque

Tae se sintió un poco asustado—Imposible.

—Posible, pagamos mucho por ti así que, espero nos sirvas bien— TaeHyung seguía totalmente en shock, parecía un jodido juego, si apenas estaba viendo Kamisama con JiMin, pero si lo pensaba bien, estaba algo distante.

—Mi nombre es Jeon Jeongguk— se presentó el pelinegro y se volvió a inclinar hacia él —Eres muy guapo TaHyung— sonrió con algo de malicia, cosa que él castaño en seguida detectó.

Él pelinegro llevo su mano a la mandíbula del contrario, delineando el contorno, apreciando de cerca lo que le era intocable. Aunque realmente parecía asustado, no le agradaba mucho ese tipo de expresiones.

Sus labios hicieron contacto sobre la tostada piel del castaño, quien seguía tratando de procesar la situación.

—Lástima que seas amigo de mi hermano mayor...— y se alejó de él.

Todo tuvo sentido en el momento que vio a su amigo salir del closet. Era una jodida broma.

—¡JiMin cabrón!— grito en seguida, y formó un gran puchero, estaba furioso.

—¡Vamos Tae! ¡Ha sido buena tu cara!— y comenzó a reírse.

—¡No es gracioso! ¡Realmente pensé que me habías vendido! ¡Insensible! ¡Bestia! ¡Animal! ¡Te odio!

—Me amas, niegamelo.

JiMin se acerco para cargarlo cual costal de papas, ayudaba bastante el haberlo amarrado. —Te compensare— eso logró a callar las quejas de su amigo.

Antes de salir de la habitación observó a su hermano menor.

—Gracias Kook

—Cuando quiera hyung— le respondió con una sonrisa.

—¿Vas a salir?—recibió un asentimiento—¡Llega temprano por favor! ¡Y Llamame!—

—Lo haré.

Se dio la vuelta para marcharse a su habitación.

Al abrir la puerta, puso a su amigo sobre la cama con cuidado. Colocándose sobre él-sin aplastarlo- y acaricio su mejilla.

—Te odio.

—Me amas—y le dio un corto beso sobre los labios logrando que las mejillas de Tae, se tiñeran ligeramente de carmesí—Te compensare— repitió.

(♡)

—¡Hey Jungkook!—le grito un rubio desde lejos, el mencionado se acerco a toda velocidad a donde le llamaban.

—Hola chicos.

—Creímos que mamá JiMin no te dejaría salir—se quejó el mismo rubio que lo había llamado. Y los chicos se empezaron  a reír.

—Esta en casa con TaeHyung—en seguida guardo silencio y puso cara de pocos amigos.

—Como sea vámonos—

[♡]