¿Quién Es Ella? «Terminada» Jacob Satorius, Johnny Orlando, Magcon, Blake Gray

Capítulo 45

A la mañana siguiente me despierto y miro la mesita de noche donde está la lámpara y una foto de ¿Blake? Se que es su casa pero aquí no habían fotos de el anoche.
Me estiro para quitarme lo adormilada y es cuando me doy cuenta de que estoy en la habitación de Blake. El antes nombrado sale del baño con una toalla en la cintura, se acaba de bañar.

— Buenos días, Bizcochito

— ¿como llegue aqui?

— yo también amanecí bien, gracias — lo miro mal — yo te traje.

— ¿y por que?

— porque no quiero que estés enojada conmigo — hace puchero.

— no me enojo, si prometes no decirle a nadie lo que pasó ayer.

— ¿hablas de que querías que te folle? Lo prometo.

— no quería que me follaras, sólo fue un sueño.

— lo se. Ahora ve a bañarte mientras yo preparo el desayuno.

Y hací lo hago, entro al baño, hago mis necesidades y me ducho con agua fría, ya que hoy es un día caluroso.
Minutos después; salgo del baño y me visto con un short negro brillante y una blusa color rosa que muestra el ombligo, bajo las escaleras y me dirijo a la cocina.

— ¿Cómo diablos hiciste eso? —digo mirando a la mesa en el comedor.

Sobre esta se encuentran mis tostadas francesas favoritas, rellenas a rebosar de Nutella, picadillo de batata que hizo exactamente como lo hago yo, y frutillas, que de alguna forma había cortado y rellenado con crema batida.
Este es uno de mis desayunos favoritos.

—Soy un hombre de muchos talentos. Algunos están escondidos, otros no. Tal vez, algún día, me dejes mostrar algunos de los escondidos. — Estoy tan deslumbrada con la comida que no puedo hacer un comentario rápido.

—Santo cielo, hombre. No sabía que podías cocinar

De acuerdo, de acuerdo, debo admitirlo. Blake la lanzó fuera del parque. Las tostadas francesas son una de esas comidas que parecen simples de hacer, pero es increíblemente fácil echarlo a perder. Él ha sobrellenado el centro con tanta Nutella, que esta se derrama cuando la corto con el tenedor, y se chorrea por mi mentón cuando la muerdo. La limpio y lamo mi dedo. Blake esta observándome, esperando por mi reacción.
—Está bien, supongo —digo cortando otro pedazo, llevándolo a mi boca.

Levanta sus cejas y toma una mordida del suyo, masticando lentamente.
Por Dios era como si hubiese muerto e ido al cielo de los desayunos.
Realmente esperaba que él no fuera a usar sus habilidades culinarias como influencia para favores sexuales. Por esto, voy a tener que rendirme.
Pero no hoy...
Por como vi, su miembro es demasiados grande para una virgen, así que no, no y no.

— me gustaría saber en qué rayos piensas — dice mirándome con atención.

— pienso en que podríamos hacer hoy — le doy un sorbo a mi vaso de milo.

— estaba pensando en invitar a los chicos para meternos a la piscina.

— mmmm no puedo, pero llamalos.

— ¿por que no puedes? — porque tengo cicatrices y no quiero que las vean — ¿tienes la regla?

— no, no tengo la regla. Es Que.... — ¿le digo? Siii — no tengo traje de baño.

— te metes en bragas y top

— ¡no! La verdad es que... tengo cicatrices, en mis caderas, por eso mis shorts no son tan cortos como los de Loren. No quiero que las vean — suelto por fin.