Capítulo único.

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El movimiento en su vientre lo despertó de su reconfortante sueño. Abrió los ojos lentamente encontrándose con la penumbra de su cuarto.

Se quedó quieto viendo el techo, esperando a que otro movimiento no se hiciera presente. Para su mala suerte, en su vientre se hizo notar una patada.

Con suavidad se sentó en la cama para no despertar al chico junto a el. La pantalla de su celular marcaba las 3:07 am. Tomó el extremo de su sudadera rosa, cortesía del chico a su costado, y lo alzó para dejar expuesto su vientre.
Los últimos meses había tenido que dejar de lado sus camisas y pantalones ajustados, ahora tenía que usar ropa holgada en exceso, de preferencia sudaderas y suéteres casi tres tallas más grandes de la normal. Siempre que podía sacaba del armario los del mayor. A este no le disgustaba, le causaba ternura verlo usar su ropa.

- Bebé, es muy tarde para que estés despierto.- Su voz salía en a penas un susurro dirigido a su vientre ya bastante abultado. Su mano palpaba su propia piel buscando los movimientos del bebé.- Quiero dormir,pequeño. ¿Cómo es que tienes tanta energía en ese cuerpo tan chiquito?- El bebé en el último mes se había hecho notar con suaves movimientos durante el día, pero nunca por las noches, por lo que le extrañó esta vez.

Estiró su mano a un costado para encender la lámpara del velador. Se arrepintió al instante en que el cuerpo junto a el se movía por la luz impactando en su rostro. Su ceño se frunció entre sueños.

-Lo siento, te desperté...-El menor murmuró avergonzado mientras que con una mano tapaba la luz que llegaba directo a los ojos ajenos. Adormilado, el mayor buscó la mano frente a el y dejó un suave beso en esta.

- ¿Por qué estás despierto? Debes dormir Hannie. - El mayor mantenía los ojos entrecerrados por la luz y su cabello azabache se encontraba desordenado. A JeongHan le gustaba mucho ver cuando el mayor despertaba, se le asemejaba a un tierno cachorro.

- El bebé no me deja dormir, está pateando. - El pelilargo soltó un suspiro agotado mientras una nueva patada impactaba en uno de sus costados.-Tiene demasiada energía...

-¿Dónde está pateando?- La mano del mayor fue guiada hacia un costado del vientre de seis meses del menor. -¿Aquí?- El menor asintió viendo como el ajeno acariciaba la zona. Unos minutos bastaron para que el azabache también sintiera a la criatura.

-Uh, pateas fuerte.- El mayor rió suavemente mientras veía su vientre. La vista era demasiado dulce para JeongHan.- Hey.~ Bebé, tu mami quiere dormir. ¿Por qué no descansas con nosotros y mañana lo molestas?

-¡Oye!- El menor le dio un suave golpe en el hombro a modo de enfado. El pequeño en respuesta se volvió a mover en su interior.

- Oh, eres difícil de persuadir. ¿Sabes? Tu mami tiene una voz espectacular. Cuando me siento triste el me canta hasta que me duermo. Pero hoy el está muy cansado como para cantarte ahora, así que papá Cheol lo hará, pondré todo mi esfuerzo para cantarte.

-Pierdes el tiempo, SeungCheol. Cuando le canto, reacciona de la forma contraria, se mueve el doble.

-Déjame intentarlo.- Dirigió su vista hacia los del castaño, para luego inclinarse hacia el y dejar un beso en sus labios. El contrario se quedó mudo ante el gesto, sin saber que decir.- ¿Estás listo bebé?- Un golpe bajo su mano le hizo sonreír con ternura. La voz grave y suave a la vez de el mayor se hizo presente junto a una canción lenta. JeongHan ya la conocía, se la había cantado en varias ocasiones al contrario porque sabía que le gustaba. Cerró los ojos dejando que la voz del mayor inundara cada parte de su cuerpo, relajándolo. Los minutos pasaban lentamente junto a la voz del contrario, el menor se encontraba dormitando entre el sueño y la realidad.

Night. × JeongCheol/ SeungHanWhere stories live. Discover now