¿Verdad o reto?

1. ¿Verdad o reto?

Masahiro, Kousuke, Kensuke y Hasekura estaban sentados en la mesa de la cocina, esperando a que la comida que Masahiro estaba preparando estuviera lista.

Por un lado, Kensuke y Hasekura estaban jugando a un juego en el celular del primero; como siempre, Kensuke gritaba emocionado y hablaba animadamente mientras que Hasekura le seguía el ritmo sonriendole. Y por el otro lado, Kousuke estaba sentado frente a ellos, corrigiendo unas tareas que le habían quedado pendientes y que quería quitarse de encima para no tener que corregir nada en el fin de semana. Masahiro estaba sentado junto a él, viéndolo en silencio, y cada tanto se levantaba para ver cómo iba la comida.

Ese día solo eran ellos cuatro, ya que el resto de sus amigos estaban en sus respectivas casas debido a que no a todos les había ido bien en los exámenes, por lo que sus padres parecían haber tomado medidas al respecto. Además, la madre de Kensuke y Kousuke estaba de nuevo afuera, con sus amigas del trabajo en el karaoke.

Así que ese día, la casa era de ellos cuatro, y podían usarla como más quisieran.

-¡Vamos! ¡Vamos!- gritó Kensuke mientras movía los dedos de manera rápida sobre la pantalla de su celular. Hasekura estaba viendo cómo jugaba casi de manera hipnotizada.

Masahiro sonrió al verlo, pero a Kousuke parecía no hacerle mucha gracia.

-¿Hace falta que grites tanto?- se quejó Kousuke-. Estoy tratando de corregir las tareas de su curso, así que mejor no grites o podría calificarte con un tres por error.

Esa siempre era una amenaza efectiva contra Kensuke, el cual bajó el celular y vio a su hermano perplejo. Las matemáticas eran su debilidad.

-Perdón, no hago más ruido- dijo Kensuke mientras bloqueaba la pantalla de su celular.

Masahiro lo vio y rió. Le daba gracia lo manipulable que podía ser su mejor amigo.

-No te preocupes- lo consoló Hasekura colocándole su mano en el hombro-. Podemos hacer otra cosa.

Masahiro se levantó para ver cuánto le faltaba a la comida. Mientras tanto siguió escuchando lo que decían detrás de él, volteando cada tanto para también verlos.

-Es que si no están los chicos acá es muy aburrido- dijo Kensuke arrastrando la última palabra mientras se recostaba en la mesa.

Sus palabras parecieron herir a Hasekura.

-No sabía que te aburrías tanto conmigo.

Kensuke se dio cuenta al instante de lo malo que había sonado. Se volvió a sentar derecho.

-¡No me refería a eso!- dijo tan rápido que apenas se le pudo entender-. Solo quería decir que si no están los chicos es... bueno, más aburrido. Pero no porque estés conmigo.

Masahiro ya había revisado la cena, así que ahora se dedicó a ver cómo Kensuke trataba de salvarse de lo que había causado.

-No me pareció que te refirieras a eso- dijo Hasekura con tono herido y volteando ligeramente la cabeza.

Masahiro vio que a pesar de que eso era una pelea muy simple, Kensuke ya se había comenzado a desesperar. Era algo propio de él; siempre sacaba todo de proporción.

-No te pongas así, Hasekura...

Entonces Kensuke lo abrazó. Masahiro notó que Hasekura ya había comenzado a ceder al sentir el tacto de su novio.

-En serio, no te enojes- insistió Kensuke de nuevo alargando la última palabra. Seguía abrazando a Hasekura, colocando su cabeza en su hombro.

Finalmente, Hasekura pareció ceder.