Arruinaste mi identidad (Truten)

Capítulo 3: La confesión de Goten

Goten acababa de marcharse y Trunks se encontraba sentado al borde de su cama, estaba agotado física y mentalmente, levantó la mirada mientras agitaba su cabello, hizo una mueca de molestia y suspiró. "Todo está bien" pensaba sin notar cómo le temblaban las manos. Su cuerpo estaba afectado, sentía su estómago agitado y lleno de nauseas. "Él está bien" pensó mientras se tiraba a la cama estirando sus brazos con los ojos abiertos y perdidos en el techo ignorando todos los ruidos externos. "Yo estoy más afectado que él, he pasado por cosas difíciles, pero ver a Goten a punto de morir me ha roto. Siendo sincero Goten es como mi mano derecha, guardo una gran confianza en él, si muriera nunca encontraría a alguien así. Tengo que intentar calmarme" caviló hasta que su mente quedó vacía pero no pudo dormir en toda la noche.

Los días pasaban y mientras que a Goten le costaba cada vez menos relacionarse en la escuela, Trunks no había superado todo lo que había sucedido en las últimas semanas. Goten había hecho nuevos amigos, destacaba uno de ellos por ser un chico guapo de tez blanca; su cabello castaño resplandecía con la luz del sol en esa hora que todo es más brillante, sus ojos eran verdes y sus pestañas gruesas pero finas, su rostro era redondo, nadie dudaba que se tratase de uno de los chicos más atractivos del colegio. El pelinegro se despidió de todos sus amigos menos del castaño quien lo acompañó a la salida de la escuela. Ambos chicos estaban muy sonrientes, antes de encontrarse con Trunks se despidió afectuosamente del chico, a la vez que sentía tener encima unos ojos familiares los cuales se percataban de la escena con intriga.

-¿Qué te sucede?- preguntó 

-N-no es nada- mintió Trunks –Veo que tienes nuevos amigos-

-Ahh, es verdad- dijo el pelinegro mientras se tomaba la parte posterior de la cabeza.

-¿Ya estás listo para tus exámenes parciales ?- mencionó para cambiar el tema

-Creo que no, no me gustan las matemáticas-

-Nada nuevo, eres peor que Mister Satán en cualquier combate de artes marciales-

-No es verdad- exclamó poco convencido –no del todo-

-Seguro que no aprobarás, a ver quién te ayuda. ¿Por qué no le pides ayuda a uno de esos nuevos amigos que tienes?, se ve que son muy inteligentes- ironizó Trunks, pronto se apenó de hablar sin pensar pero era como si alguien más lo hubiera dicho por él.

-Mmm, no creo que me ayuden mucho, estudiaré por mi cuenta- respondió Goten

-Suerte con eso, dudo que apruebes si estudias por tu cuenta, ni siquiera eres capaz de poner atención a una clase por más de cinco minutos sin distraerte con la más mínima cosa, hasta Pan o Bra se concentran más que tú- expresó el chico pelilila con algo de maldad.

-Claro que no, ¡te demostraré que no voy a reprobar!- de en un momento a otro Goten recordó una de las noticias que quería darle –espera Trunks, ¿quieres sabes que ocurrió hoy? -

-Ahh- vaciló intrigado

-¡Me uní al club de lectura y literatura de la escuela!- mencionó con algarabía.

-¿Tuuuú? Jamás hubiese creído que tú te interesarías en algo relacionado con la escuela- expresó con sinceridad 

-La profesora dijo que tengo potencial, ¿o tú qué opinas?- replicó el menor

-Yo creo que no- 

-Mis amigos me dijeron que seguramente me irá muy bien-

En ese momento recordó al chico de la salida y  el resto de su grupo de los cuáles no paraba de hablar. Inmediatamente le siguió un gran malestar, casi podía sentirse furioso con recordar a esos sujetos, cómo era posible que les prestara tanto atención a ellos hasta el punto de recordárselos siempre voluntaria o involuntariamente.