|editando| Adoptada para casarme con el hombre mas millonario de Corea del Sur... Park Jimin.
____es una chica de diecisiete años, vive en un orfanato, ya que sus padres murieron de muy niña. Siempre tuvo la esperanza de ser adoptada por una hermosa...
- No.. Solo olvídalo. No le pediré disculpas a nadie. -se cruzó de brazos-
- Bien.. -me levanté de la cama y camine a la puerta, Jimin corrió a mi y me jalo del brazo girándome a él, pegándome a su cuerpo-
- Tu ganas.. Me disculpare, solo porque no quiero que te enojes. -dio un casto beso en mis labios-
- Eres un... -me interrumpió-
- Soy un perfecto esposo. -sonrió- ¿Verdad?
- reí- Si eso.
Unió nuestros labios en un largo y delicado beso. No se y ni me pregunten como, pero ya estaba yo bajo Jimin, sintiendo la comodidad del colchón. Siguió besándome, subiendo cada vez más la intensidad. Posó sus manos en mi cintura, para después besarme en el cuello. De repente dejo de besarme y me miró con su respiración agitada
- ¿Podemos.?
Se refería a eso del embarazo, pero no tiene nada de malo hacerlo si estás embarazada, al principio creo.
- Claro. -le sonreí, me respondió de la misma manera y volvió a besarme-
Sus manos viajaban una y otra vez por todo mi cuerpo. Haciéndome sentir especial. Aún teníamos la ropa de la cena, quite su saco de vestir, para después con cuidado desabrochar cada uno de los botones de su camiseta color blanco. Cuando pude quitarla sin problema, dejando su torso desnudo, me tomo de la cintura levantándome un poco, con mi ayuda. Llevo sus manos a la parte trasera de mi vestido. Para desabrocharlo lentamente, mientras devoraba mis labios. Lo quito lentamente y sin torpeza alguna. Hasta que me dejó en ropa interior. No me quede atrás y decidí desabrochar aquel pantalón negro de vestir. Pero me lo impidió tomando mis manos y llevándolas arriba de mi cabeza, acorralandome aún más.
Hundió su rostro en mi pecho, haciendo que de a poco soltara jadeos. Beso mis labios una vez más, para después deslizar sus manos por mis brazos, llegando a mi vientre. El cual lo acaricio con cuidado y delicadeza. Subió a besar mi cuello, seguido tomó uno de mis pechos sobre la tela del sostén, y jugó con el. Se separó de mí, cambiando de posición, ahora yo estaba sentada a horcadas sobre él, llevó sus manos a la parte trasera de mi sostén, mientras yo lo besaba y jugaba con su cabellera. Lo quito sin ningún problema, deslizando por mis brazos, lo aventó lejos de su vista. Tomo a ambos y los sobo a su gusto. Sin quedarme atrás, comencé a mover mis caderas sobre su miembro, rozando ambos. Podía sentir lo duro que ya se encontraba este. Soltó mis pechos y tomo mis caderas con fuerza, para comenzar a mover las a su gusto. Gemía sin parar al igual que yo.
- Ya no puedo más.. -hablo agitadamente-
Me empujo a la cama para besarme desesperadamente, como pude lleve mis manos a su pantalón, y lo desabroche. Lo baje, para que después él con mi ayuda lo sacará finalmente de nuestras vistas. Al igual que nuestras ultimas prendas. Llevó su miembro a mi entrada y con cuidado entro. Ya una vez listo, comenzó a moverse lentamente. No había sido tan cuidadoso desde la primera vez que estuvimos juntos. Ahora, supongo que era por el embarazo.
Siguió así, hasta que pedí que lo hiciera más fuerte. Me obedeció y lo hizo aún más fuerte, pero no tanto. Después de venirse beso mis labios y susurro un pequeño "Te amo" . Para después caer a mi lado. Amaba ver su cabello caer por su sudorosa frente, haciéndolo ver aun mas sexy. Tomo la sabana, me atrajo a él y nos cobijo a ambos. Para después abrazarme y caer en un profundo sueño.
{...}
JIMINPOV
Si alguien llegara y me dijera que esto es un sueño.. Les diría, que no quiero levantarme nunca. No quiero despertar de este hermoso sueño. Soñé mucho con este momento, en el que mi princesa me dijera esto. Desde el momento en el que nos casamos. No quería separarme de ella, no me veía en un futuro con alguien que no fuese ella. Ahora saber que tendremos un hijo, producto de nuestro amor. Me hace entender todo. El esfuerzo, completamente todo lo que me sucedió, lo que a ella le pasó, las pruebas, peleas y todo... Valió la pena. Ahora me veía en un futuro, ambos en un hermoso jardín viendo correr a nuestros hijos de un lado a otro.. Si lo se, demasiado cursi.
Pero era la verdad. Antes mi vida no tenía sentido y menos cuando no estaba ____ en ella. Ahora tenía dos grandes razones para estar de pie. Ser feliz, seguir adelante y luchar por ellos. No dejaría que nadie me arrebate esta felicidad.
Días después.
Estábamos en el comedor, desayunando juntos como lo son todos los días. Hoy realmente no quería ir a trabajar.
- ¿Quieres algo? -pregunte nuevamente-
- No amor. Estoy bien. -me regaló una sonrisa y siguió comiendo-
- ¿Segura? Porque si se te antoja algo, tu dime y correré hasta encontrarlo.
-ella rio- Jimin, cariño estoy bien. Ahora no se me antoja nada.
- Esta bien.
Seguimos comiendo hasta que suena el teléfono de ____. Le estaban llamando.
- ¿No vas a contestar? -le pregunté-
- No.. -estaba nerviosa, se cuando lo esta-
- ¿Quieres que conteste yo? -se levantó rápido de la mesa, lo cual me sobresalto-
-No. Yo contestare. -tomó su teléfono y camino al jardín a contestar-
Ayer también la vi hablando por teléfono y no la veo muy bien después de sus llamadas. Quizá pasa algo y no me quiere decir. Me preocupa que me oculte algo, y mas si es de nuestro hijo.
