—¡Pero esto es demasiado!—interrumpió levantándose de la cama para acercarse a Brendon, lo tomo de los hombros e hizo que se miraran frente a frente—prostituirte por un "amigo" es demasiado. Sea cual sea su condición.

—Solo no quiero hablar más de ello.

Los dos apartaron sus miradas del otro. Brendon apartó las manos de Dallon de sus hombros y continuó con su maquillaje, mientras Dallon, solo volvió a sentarse en la cama y se limitó a observar como la persona a la que amaba se arreglaba para tener una noche alocada con otra persona que no era el.

Al terminar con su maquillaje, Brendon se puso unos tacones bastante bajos ya que fueron los que pudo conseguir, tomó una chaqueta y su celular.

—Te llamaré si algo malo pasa—dijo Brendon a Dallon.

Deposito un cálido beso en su cachete, lo miro e hizo una gran sonrisa para tranquilizarlo un poco, después salió de su habitación para irse a el bar. Necesitaba llegar temprano ya que Joe se lo había pedido, así podría explicarle las normas básicas para que sobreviviera mientras Ryan no estaba. Se fue en un taxi, como era habitual.

Ese día no se encontraba ebrio, lo cual hacía que pensara con más claridad y ese arrepentimiento penetrara en toda su cabeza, él entendía que solo lo hacía por Ryan, pero sobrio era un poco difícil de controlar esa situación. Tristemente sentía que solo podía sentir consuelo en el alcohol, algo decepcionante que solo terminaría perjudicándolo, cosa que, el aún no entendía del todo. Varias cosas pasaban por su mente, y la necesidad de tener alcohol en su organismo era una de ellas.

Al sentir el taxi parar completamente su corazón se aceleró increíblemente, no sabía cómo sobrellevar la situación a la que se estaba enfrentando. Cerró los ojos por un segundo para dar un gran suspiro y así conseguir el coraje para entrar al Valentín Spook.

Cuando entró se encontraba todo exactamente igual a como lo recordaba, las mismas luces en tonalidades rojas que incitaban a la lujuria, el pequeño escenario en el que se presentó algunas veces, la barra y el pasillo al final, ese pasillo por el cual tendría que estar pasando toda la noche. Dio unos pasos, Joe se encontraba en la barra, pudo escuchar los tímidos pasos de Brendon así que dio la vuelta y fue directo a el.

—Así se escucha un principiante—bromeó un poco con Brendon—hoy es una noche un tanto importante, tu primer cliente es un pez gordo. Jake Sinclair.

Jake Sinclair era un adinerado hombre de la mafia en Los Ángeles, se le consideraba cliente habitual de él Valentín Spook, era su lugar proveedor de sexo, drogas y alcohol. Siempre que se sentía complacido con las prostitutas dejaba una gran cantidad de dinero extra por lo cual era bastante importante ser los mejores con el.

—¿Jake Sinclair?—pregunto Brendon con una voz tímida.

—Si, es importante que lo tengas satisfecho por eso te daré unos consejos que el buen Ryan aprendió con el.

Lo único que paso por la mente de Brendon fue Ryan. Era alguien en quien no podía dejar de pensar últimamente.

—Su habitación favorita es la VIP, le gusta el diseño y dice que la cama es cómoda, te llevaría a ella pero la están limpiando—Brendon trataba de prestar atención a todo lo que decía Joe—le gusta estar arriba y es un poco agresivo. Siempre debe de haber una botella de vino australiano. Y creo que eso es todo lo básico.

Moon Boy| RydenWhere stories live. Discover now