Capítulo 18

1.9K 186 35
                                    

Talina

Me levanté de la cama como cualquier otro dia, sin embargo ahora mismo mi cabeza estaba hecho un enorme alboroto lo que había sucedido ayer en la casa de Williams me lleno de muchas dudas tenía tantas preguntas al respecto pero sabía que no podía conseguir fácilmente además lo que sucedió en el jardín tampoco me deje concentrarme, nunca pensé que fuese un buen besador.

— ¿Que sucede?— pregunto Aimee sin despejar la vista del volante—Estas muy callada.

—Sólo pensaba.

—¿Tan difícil fueron las matemáticas avanzadas?

—Para nada, fueron tan sencillas que al final fui yo la que le termine explicando a William.

Mi hermana me miro un momento, supuse que se le hizo extraño que ahora llamará a Masón por su segundo nombre.

—La verdad ayer me di cuenta de lo pequeño que es el mundo. Recuerdas que solías contarme que mamá tenía una gran amiga con la cual hacían locuras en su juventud.

—Como olvidarlas a mamá le encantaba contarnos sobre eso en el hospital.

—Bueno pues esa mujer resultó ser la madre se William, las cosas no tomaron un ritmo del todo favorable.

—¿Terminaste discutiendo con William?— pregunto mi hermana con cierta curiosidad por el desenlace se la historia por su tranquilidad ante el tema supe de inmediato que ella no era consiente de la supuesta desaparición de mamá.

—La verdad termine llorando y huyendo de su casa—confesé y mordí mi labio nerviosa— Pero eso no es lo que me tiene en un dilema existencial.

—Entonces,¿que es?

—William y yo terminamos basándonos en el jardín de Eliam y ahora me pregunto que es lo que somos.

Aimee frenó de golpe, me miro con pánico y luego sonrio, creo que ahora no era la única con un gran dilema en la cabeza. El sonido de un clanox para presionados de que siguieramos avanzando nos llamó la atencion, mi hermana volvió a sonreirle y siguió conduciendo.

—¿Y que harás?

—Supongo que le preguntaré que somos ahora.

—¿Así de simple?

—Bueno es que la solución es así de simple.

—Pero..

—Aimee si dejas que las cosas se resuelvan solas jamás llegaras a ningún lado, necesito hablarlo y encontrar la respuesta aunque parezca simple, por que esas son las mejores decisiones—mire la ventana y abrí la puerta— Por cierto, gracias por traerme a la universidad.

Baje del auto con prisa para correr dentro en busca de William, a esta hora se encontraría buscando algo entre su casillero y me alegra saber que su rutina matutina siempre fuese puntual, pues así era la manera más rápida de encontrarlo. Me acerqué con cautela, el estaba tan concentrado observando sus libro que nisiquiera me noto que me encontraba a su lado, note el espacio que había entre el casillero y él, sonreí a mis adentros y entre por aquel pequeño espacio para quedar frente a frente.

¿Donde Se Queda Todo Lo Que Pasó En Las Vegas? "HISTORIA DOS" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora