El corazón que no vi - ||Marichat||

Cap 4

Narra Marinette.

Era el día de la presentación, Adrien y yo trabajamos súper duro dejando al lado los nervios para concentrarme más en el trabajo. Esta nota definirá si podemos entrar a vacaciones, ya que falta poco para que llegue el verano, en caso contrario tendríamos que quedarnos en las clases durante ese tiempo.

Un grupo acaba de exponer su trabajo, nosotros eramos los siguientes. Sentía mis manos sudar; estaba nerviosa, bueno siempre que hago este tipo de exposiciones, no estaba acostumbrada. Volteó hacia él que estaba junto a mi, me dirigió una mirada tierna diciéndome "Tranquila, todo saldrá bien". Ya sintiéndome mejor con su apoyo, pasamos al frente de la clase, todas las miradas pasaron hacia nosotros. Preparamos la cartelera y estábamos listos para exponer.

Además... Tengo a Adrien a mi lado.

-♡-

– Una hembra de mariquita pone más de un 1,000,000 de huevecillos a lo largo de su vida. Poseen el sentido del olfato en sus patas. En muchos países, como Irán y Suiza, las simpáticas mariquitas son consideradas símbolos de buena suerte. Mientras vuela, una mariquita aletea 85 veces por segundo. Las mariquitas producen una sustancia que huele y que sabe horrible. Esto les ayuda a no ser devoradas por sus depredadores como las aves.

– Mientras comen, mastican de lado a lado, no arriba a abajo como los humanos.
El tamaño de una mariquita macho es más pequeño que el de la hembra. Las mariquitas se encuentran en muchos colores. Usualmente tienen manchas aunque algunas mariquitas carecen de ellas– eran los argumentos de nuestra exposición, elegimos temas y curiosidades que no se conocían sobre este animal– una mariquita puede vivir de 2 a 3 años.

Al acabar de exponer, recibimos aplausos de parte de nuestros compañeros. A todos les pareció un gran discurso y comentaban de como les encantaban mi dibujo.

– Excelente trabajo, chicos– nos felicito la profesora– muy buenos argumentos y hermoso dibujo de las mariquitas.

– Es merito de Marinette– comentó Adrien al lado mio– es muy buena dibujando– en ese momento no pude evitar sonrojarme.

– Me encanto su trabajo, fue una gran idea ponerlos juntos. Tienen 10– Adrien y yo nos miramos felices, obtuvimos una buena nota. Nuestro trabajo en verdad rindió frutos– pueden sentarse chicos.

– Gracias, maestra– respondimos y llevando nuestra cartelera, nos dirigimos a nuestros asientos pero de llegar al mio.

– Gran trabajo, Marinette– Adrien alzó su mano para yo pudiera dar cinco con él, con sonrisa tímida alce mi mano y la choque con la suya. A pesar de ser pocos los segundos en que toque su mano, disfrute su tacto sobre mi palma de la mano.

Desde que realizamos el trabajo se podría decir que ahora somos un poco más unidos que antes. Me siento feliz de ese logro.

¡RING! ¡RING! 

La campana que señalaba el recreo sonó y todos en un abrir y cerrar de ojos salimos. Alya iba a mi lado.

– Y... ¿como les fue?– preguntó Alya pues, quería detalles respecto a Adrien y yo– ¿se divirtieron?

– Tanto quieres saber, ¿eh?

– Como tu amiga y colaboradora de que este ship se realice, tengo el derecho– agregó Alya a lo que yo reí. Bajamos por las escaleras al primer y nos sentamos en una silla para estar más cómodas.

– Bueno, la verdad... ¡Fue un sueño! ¡A Adrien le pareció encantar realizar el trabajo conmigo; largas horas juntos, comimos juntos...

– ¿Estuvieron en tu cuarto?