Capítulo 13: Historias graciosas

313 28 9
                                    

Me puse nerviosa. Además de ese contacto, temía a que notara el micrófono que llevaba. Que incluso me asusté por si Golden Bones, Skullivard o quien sea que estuviera escuchando, sintiera los fuertes latidos de mi corazón. Bajé la mirada para encontrarme con su cabellera castaña. Solté un suspiro y comencé a pensar en cómo animarlo.

—Recuerdo cuando era pequeña....— comencé diciendo mientras él levantaba su cabeza para verme a la cara. Tomé aire y bajé la mirada a mis manos —Siempre enterraba los anillos que me compraban. Pensaba "pronto crecerá el árbol"— imité la voz de una pequeña niña.

Giré mi cara al escucharlo reír un poco. Sonreí por su gesto. Notó que lo observaba y paró de reír —¿Y q-qué paso?— preguntó aguantando la risa.

Miré hacia el mar y, mientras negaba con la cabeza y movía los hombros, dije: —Nunca creció— aún con la sonrisa para parecerle graciosa. Y función: siguió riendo —No te rías de mí inocencia— me hice la indignada y la enojada —Ahora, te toca contar un recuerdo gracioso a ti—

Me miró con una sonrisa en su cara y miró en dirección al mar. No dijo nada durante unos minutos. Se veía hermoso contemplando la noche mientras pensaba aún con su sonrisa. Sonreí tímidamente mientras me sonrojaba un poco.

—Fue cuando... Iba a la escuela. Estaba saliendo con varios de mis compañeros, entre ellos iban también mujeres. Yo iba al lado de una— y carcajear bajo con voz grave. Eso hizo sonrojarme más y ponerme celosa —Fue cuando pasamos al lado de unos chicos que comenzaban a silbar. Pensamos que se trataba que era a las chicas, pero no era así....— y él se sonrojo. Comencé a reírme despacio —Lo supimos cuando uno me pidió mi número de teléfono—

Ni lo aguante y comencé a reírme. Realmente una historia graciosa. Cuando paré de reír, noté que era observada por él. Me sonreía tiernamente. Y giré mi cara hacia otro lado.

—Que.... Gracioso— dije para luego mirar el mar.

Sentí como se acomodaba en su lugar y rozaba su mano con la mía. Y mi corazón comenzó a latir rápidamente. Todo lo demás, desapareció para mí, cuando continuó colocando su mano sobre la mía. Tímidamente, fui levantando cabeza, de nuestras manos hacía él. Cuando estuve cara a cara, sentí que la mía comenzaba a calentarse. De apoco en su rostro, se dibujaba una sonrisa, y tontamente, también en mí....

La luz comenzó a golpear mi cara de apoco. Me senté y miré hacia todos lados con los ojos entre-abiertos. Dirigí una de mis manos a mi cabeza, y todo mi cabello estaba revuelto. Me quejé por lo bajo mientras comenzaba a pararme de la sabana. Ordené todo como lo había hecho la mañana anterior. Me alisté y con mis manos, comencé a desenredarme el pelo como podía.

Cuando terminé, busqué con la mirada a Sazafras. Que raro, no se encontraba en la tienda. Comencé a llamarla, pero ni un ruido se escuchaba, ¿Dónde estará? Era la pregunta que azotaba mi mente.

Entonces decidí salir a fuera a esperarla, si había ido a comprar. Y así lo hice: cerré la puerta detrás de mí, y comencé a ver de derecha a izquierda. Pero no había rastros de ella. Llevé una de mis manos a mi nuca para pensar un poco y hacerme una idea de dónde podía estar.

Estaba tan sumergida pensando y observando el piso, que me sorprendió ver unos pies huesudos de color dorado enfrente mío. Tragé saliva nerviosa. Era él. Todo ese tiempo me había olvidado del micrófono que llevaba escondido.

Lentamente fui levantando la cabeza con una expresión algo asustada, para encontrarme cara a cara otra vez...

The Bad Boy (Zak Storm)Where stories live. Discover now