Capitulo 3: Llegando tarde

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A decir verdad, me relajo mucho haber tenido como psicóloga a Paloma y poderle platicar todo lo que ocurria en mi vida.

Me voltee y vi el reloj. Algo estaba mal... ¡Chin, chin! ¡Son las 6:40 y la primera clase comienza a las 7:00!

Moví las cobigas y logre salir de ahí con vida. Me vestí y a continuación baje a desayunar. Justo cuando creí comenzar bien el día, me tope con un Hugo molesto.

-Al fin que te levantas, creí que te debía hechar un balde de agua fría en la cholla.

-Ja ja, cuanta gracia tiene eso.

Ignore el hecho de que me estuviese fulminando con la mirada, tome algo de leche y unte algo de Nutella a mi pan tostado. Mmm... una delicia.

Termine y me fije en la hora. 6:50, podría llegar a tiempo si iba a paso de "toro cabreado", lo que significaba que tenía que atropellar cuanta persona se interponga en mi camino a partir de unos 10 segundos...9, 8, 7 (agarre mi mochila y las llaves)...6,5 (espero a que Hugo salga y cierro las puertas)...4,3 (atravieso el patio y me pongo en posición de corredora, *como Ana Guevara*) 2, 1... ¡ABRAN PASO! ¡NO RESPONDO CHIPOTE CON SANGRE!

Durante mi recorrido atropelle a seis chicas, un hombre, dos niños y muy pronto a un muchacho que aparentemente va en mi escuela si es que no se quita de mi camino...

El chico, creo que al escucharme correr, se da la vuelta y como ve que vengo corriendo como alma que lleva el diablo, abre los ojos como platos. Tarde un poco en identificar a mi victima y me di cuenta que era... ¡Mierda, mierda y triple mierda! ¡Los frenos no funcionan!

¡ZAZ! Me estrelle con la persona que ha hecho sufrir a mi corazón las ultimas tres semanas. Las mochilas volaron y él termino aplastado por mi. Abri los ojos. A pesar de no haber chocado directamente al suelo, me dolia hasta el alma. Rapidamente me arrodille y le inspeccione el rostro al pobre. Gracias al compadre de allá arriba, no salió herido, solamente dolido.

Pegue mi oido a su pecho y escuche a su corazón latir y su respiración. cuando despegue mi rostro de ahí, me di cuenta que Leo me observaba.

-Pe...pe...perdón, no era mi intención chocar contigo. Es que venía corriendo por las clases y...y... ¿Estas bien?- vaya que si estaba nerviosa

-Estoy bien- me regalo una de sus hermosas sonrisas y yo sentí desmayarme -Solamente un pequeño detalle...- todavía seguia arrodillada arriba de él y pronto me dí cuenta en cuanto de lo que quería decir.

Me levante lo más rápido que pude y le tendí mi mano para ayudarle a levantarse. Negó mi ayuda y se sacudió el polvo con lo que se había ensuciado.

-Oye, en serio, perdoname...

-¿Puedo preguntarte algo?

-¿Uh?... sí.

-¿Venías así por que se te hacía tarde?

-Sí...- dije algo apenada y baje la cabeza. 《Olvidalo. Él no es para tí. Termina de disculparte y largate》dijo mi subconsiente.

-Debes de ajustar tu horario. Son las 6:50... Otra vez.

Algo cierto es que esto ha pasado más o menos unas... cinco veces en estas últimas tres semanas.

Levante el reloj de mi muñeca, lo compare con el de la suya y levante mi vista hacia el esplendoroso sol. Como siempre, mi hora estaba mal.

Leo tomo mi muñeca y modifico la hora. Despues, levanto la vista y se encontro con la mia. 《¡Controlate, Adelice! ¡No te dejes manipular por ese chico!... por ese chico tan sexy.》 dijo mi instinto.

-Gracias- lo mire a los ojos. Me di cuenta que teniamos público y me enderece. No iba a ser una chica más que cae rendida a sus pies. -Creo que debo de irme.

Y sin más, abandone a todos en el patio, abri mi casillero y deje mis cosas. De ahí me fui a los baños. Me sente en el retrete (claramente que con la tapa puesta) y me dispuse a reflexionar hasta que dieran las 6:59.

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Hola, lectores!!!  disfrutan de su lectura???

Como apenas es mi primer libro y tengo animos de más, tal vez llegue a subir dos o más caps. seguidos.

No tengo algún horario para subir porque no quiero sentir esto como un trabajo... Quiero disfrutarlo.

No olviden votar, comentar y seguirme.

¡Los amo!

Atte.: Natilla22

La Trampa de los Ultimos DíasWhere stories live. Discover now