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-¿Qué tan buenos son tus conocimientos en neurociencia? -comencé preguntándole a Zev, ya era difícil para mi usar palabras complicadas, necesitaba saber desde que punto podía explicar el problema-. ¿Conoces la estructura cerebral?

-No soy tan idiota, pero no me quiero arriesgar. Explicame como si se lo dijeses a un niño pequeño. -respondió después de tomarse su tiempo en pensar.

-Bueno, imagina al cerebro, ¿sabes que hay ciertas partes especializadas y que controlan distintos procesos en el ser humano, no? -Zev murmuró un si y proseguí-. Lo único que necesitas saber es que hay un área llamada lóbulo occipital, digamos que ahí se regula la visión, percepción, reconocimiento del espacio, entre otras cosas; un daño en esta parte puede provocar ceguera cortical, que es la perdida total de la visión.

-¿Así se lo dirías a un niño? -preguntó sarcasticamente, pensé que lo habia simplificado lo suficiente. Decidí ir directo al punto y hacerlo a prueba de idiotas.

-Un golpe muy fuerte en la nuca, amigo, me dejó ciego.

-Oh.

-Si, oh.

-¿Estuviste involucrado en un accidente, no?

Me removí incómodo en la cama e intenté encontrar una mejor postura, al final decidí solo acostarme entrelazando mis manos detrás de mi cabeza, podía sentir una cicatriz que mi cabello ocultaba muy bien. -No lo recuerdo con exactitud, también afectó un poco mi memoria. Solo sé que intenté ayudar a alguien y a partir de ahí todo se volvió negro, mis padres me dijeron que esa persona pagó mi hospitalización. Es todo.

-¿Me estás diciendo que no has intentado encontrar a la persona que te arruinó la vida?

-¿Y qué gano con eso? ¿Mágicamente mi vista regresaría? -pregunté irritado, era la vez número mil que me hacían esas preguntas-. Te dije que yo fui quien intentó ayudar, o eso creo, el punto es que significa que fue mi culpa, nadie me llamó a entrometerme.

Se quedó tan callado que creí que se habia ido dejandome solo, me senté y empecé a tocar la cama para ver si seguía ahí, él tomó mi mano para avisarme de su presencia.

-Esto me suena familiar, lo que te pasó.

Me encogí de hombros sin saber muy bien que decirle-. Tal vez lo viste en las noticias, quién sabe, me desaparecí del mundo mientras estuve en el hospital.

-... Supongo. -dijo con un tono de duda.

-¿Y no quieres contarme lo tuyo antes de que Robin regrese? -recordé nuestro trato, necesitaba que me dijera lo suyo o me sentiría incomodo-. ¿A donde había ido?

-Dijo que iría a la tienda a comprar algo que te gusta, luego yo le mandé un mensaje pidiéndole algo para ganar tiempo.

-Cuéntame entonces lo que te sucede. -lo escuché suspirar y moverse en su lugar, después oí como sacaba unos papeles.

-¿Cuando fuiste al baño hace rato, no entraste a una habitación sola? -asentí en modo de respuesta-. Ahí vivía mi hermano mayor.

-¿Se fue a la universidad? -interrogué, era extraño que Robin no me hubiese hablado de él.

-Está muerto.

-Oh. -respondí sin saber que decir, no había pasado por mi mente algo así.

-Si, oh.

-¿Las cartas eran para él, son de él? -había escuchado a muchas personas decir lo lamento muchas veces y me sentía cansado de eso, presentí que eso era la último que Zev necesitaba escuchar de mi.

-Son para alguien a quien quiero, una chica.

-¿Eso que tiene que ver con tu hermano? -pregunté confundido.

-Digamos que ella, Holly, era casi como la novia de Holly. Se fue hace tiempo de aquí, no sabe que Jack murió y cree que esta hablando con él.

-¿Estás fingiendo ser tu hermano muerto?

-Suena más espeluznante si lo dices de esa forma.

-Solo dile que eres tú, ¿cuál es el problema? -escuché pasos a lo lejos y supuse que Robin ya había llegado, ademas de que ella estaba casi corriendo en las escaleras.

-Ella no quiere a Zev, quiere a Jack -fue lo último que me dijo ese día respecto al tema, antes de que Robin abriera la puerta de la habitación. Tampoco conseguí hablar acerca de eso con él después de ese dia.

El camino correcto [Pausada Indefinidamente] Where stories live. Discover now