Conviviendo con Famosos (Inazuma Eleven- Varias parejas)

Capítulo 14

Fudo tenía una combinación de molestia e instintos asesinos y aquello no era nada bueno viniendo del castaño, ustedes se preguntaran ¿Por qué tan molesto nuestro amado marginal?, pues muy sencillo, Kido le aviso que tendría que acompañarlo a otro país y aquello significaba tener que aguantar las huidas del millonario hacia él, pero aquello lo podía aguantar, lo que lo tenía con los nervios a flote es el molesto camarógrafo que lo seguía a todas partes y el cual no podía lastimar o tirar su estúpida cámara al bote de basura.

Ahora se encontraba en el aeropuerto, en un lado estaba el camarógrafo y en el otro Kido, quien trataba de ignorarlo, cosa que tenía sin cuidado al marginal, pero si tenía muchas ganas de romper la cámara que lo gravaba desde que se levantó, mientras que Fudo se aguantaba las ganas de lanzarse a putazos con el camarógrafo Kido rogaba de que aquellos dos días pasaran volando.

Con disimulo vio a Fudo, quien maldecía mil y una vez, en ese momento se preguntó cómo había llegado a ese situación, desde niño siempre tuvo la capacidad de verse calmado y seguro ante una dificultad, pero aquello no era el caso con Fudo, porque si, Kido veía lo que sentía por Fudo como dificultad, no quería sentirlo ya que jamás lo había sentido, era algo nuevo y no tenía conocimiento alguno del tema y aquello le aterraba.

-ya sale nuestro vuelo-aviso Kido parándose.

-que fastidio-bufo el marginal.

-¿no te gusta viajar?-pregunto mientras comenzaba a caminar.

-no me molesta viajar, me molesta no poder golpear a alguien-confeso sacándole una sonrisa al millonario, la cual borro al instante.

Para la suerte de Kido, Fudo dormía en el viaje y él aprovecho para chequear algunos documentos, aunque algunas veces le echaba una mirada al marginal, pero no pasaba de eso, solo una mirada.

-¿Por qué es tan complicado?-se dijo así mismo en un suspiro.

-porque tú lo haces complicado-dijo Fudo aun con los ojos cerrados.

-¿estabas despierto?-pregunto ante el asombro.

-no puedo dormir-confeso abriendo los ojos-te da miedo-afirmo.

-¿Qué?-pregunto confundido.

-te da miedo que un don nadie te haga sentir cosas-aquello lo dijo mirando fijamente hacia el frente y con una voz decaída.

-ese no es el punto-dijo con un toque de molestia-y no me haces sentir nada-mintió descaradamente.

-sigue mintiéndote-dicho esto se puso sus cascos y cerró los ojos dejando a Kido en sus pensamientos.

En Tokio, Kazemaru tenía problemas en su entrenamiento gracias a un sonriente castaño, quien no dejaba sus pensamientos, su entrenador lo regaño varias veces, pero no podía concentrarse por lo que decidió tomar un descanso, Toramaru preocupado hablo un rato con él pero no podía sacarse de la cabeza la sensación que Endo le causo a su cuerpo, el menor noto aquello y decidió dejar solo al peli azul, pues sabía que Kazemaru se relajaba y se concentraba mejor a solas.

Y así estuvo por algunos minutos, en sus pensamientos y pudo lograr calmarse, pero cuando iba a volver a su entrenamiento alguien lo abrazo por la espalda e hizo que una fuerte corriente eléctrica le recorriera por la espalda.

-¡hola!-saludo Endo con una gran sonrisa mientras soltaba al atleta.

-hola-saludo con un pequeño rubor en las mejillas-¿Qué haces aquí?-pregunto mientras se volteaba.

-estaba aburrido así que vine a verte entrenar-la brillante sonrisa del castaño lo hizo suspirar.

-genial-aquello lo dijo con doble sentido, pues ¿Cómo no pensaría en el castaño, teniéndolo aquí?-te puedes sentar allá-señalo unas bancas.