You.

46 16 0
                                    

—¿A quién amas?— te pregunté mientras reposaba con mi cabeza sobre tu pecho escuchando tus breves latidos.

Una pequeña parte de mí quería que dijeras mi nombre, pero era imposible.

Alguien tan fría como tú, jamás amaría a alguien tan insignificante como yo.

—A nadie.— dijiste finalmente.

—¿A nadie? ¿No amas a tu familia?— insistí inocente.

—Es difícil amar a terceros cuando te es imposible amarte a ti misma.

Trataba de procesar tus palabras y el tono tan indiferente de tu voz al soltarlas.

—¿Tú a quién amas? — preguntaste.

Pero sólo me quedé en silencio, con las lágrimas agolpándose en mis ojos en contra de mi voluntad, ¿que me estabas haciendo?

La respuesta a tu pregunta eras tú.

cigarettes after sex.Where stories live. Discover now